Para BBVA Research, el incremento del número de afiliados a la Seguridad Social decepcionó en agosto, pero la desaceleración en la creación de empleo será leve si se recupera la tendencia del mes anterior. Por su parte, el ritmo de descenso del desempleo se mantuvo el octavo mes del año.
CONTINÚA LA RECUPERACIÓN

Además, el banco confirma la continuidad de la recuperación económica española a comienzos del segundo semestre de este año y prevé que el tercer trimestre podría ser el quinto consecutivo de crecimiento en España en torno al 0,8% trimestral, según han señalado Jorge Sicilia, economista jefe del Grupo BBVA y director de BBVA Research, y Rafael Doménech, responsable de Análisis Macroeconómico de BBVA Research, durante la presentación.
BBVA mantiene las previsiones de crecimiento conocidas en agosto del 3,1% para este año y del 2,3% para 2017
Así, el servicio de estudios de BBVA mantiene las previsiones de crecimiento conocidas en agosto del 3,1% para este año y del 2,3% para 2017.
En cuanto al informe presentado en mayo, las perspectivas de crecimiento han mejorado para el presente año, como consecuencia del impacto de los "vientos de cola" que favorecen a la economía española. Entre ellos se encuentra una política monetaria expansiva, reducidos precios del petróleo, un mayor impulso fiscal del previsto y la incertidumbre en mercados competidores del sector turístico español, según subrayan desde BBVA.
No obstante, el banco espera que se produzca una ralentización del crecimiento provocada por diferentes circunstancias como como es el Brexit, la expectativa de una política fiscal menos favorable y el impacto que pueda tener la incertidumbre sobre la política económica que pueda implementarse durante los próximos años.
EL CONSUMO DE LOS HOGARES IMPULSA EL CRECIMIENTO
La demanda doméstica privada ha sido el elemento que más ha potenciado el crecimiento de la economía en el segundo trimestre de 2016, a pesar de la incertidumbre existente, afirman desde BBVA. Asimismo, desde la entidad se espera que este factor continúe siendo igual de influyente durante los próximos trimestres.
En cambio, se prevé que el crecimiento del gasto interno en 2017 sea cuatro décimas menor de lo esperado en mayo (2,3%), como consecuencia del deterioro del escenario económico y la elevada incertidumbre sobre la política económica y la derivada del Brexit. Esta situación también puede estar condicionando la puesta en marcha de algunos proyectos de inversión.
LAS EXPORTACIONES SE MODERAN
A pesar de la intensa desaceleración del comercio mundial de bienes en los últimos trimestres, la contribución de la demanda exterior al crecimiento durante el segundo trimestre fue la mayor desde el último periodo de 2012. La información disponible indica que las ventas de bienes al exterior están mostrando señales positivas, al igual que las de servicios, potenciadas por el turismo exterior.
La contribución de la demanda exterior al crecimiento durante el segundo trimestre fue la mayor desde el último periodo de 2012
Sin embargo, de cara a los próximos trimestres, la coyuntura internacional obliga a revisar a la baja la estimación de crecimiento de las exportaciones totales en 2017. El impacto estimado del Brexit, cercano a cuatro décimas del PIB,actúa sobre la economía española tanto por la importancia de las exportaciones al Reino Unido, como por la exposición indirecta a través de la demanda global.
En el mercado del petróleo, las previsiones de BBVA Research apuntan a un aumento de los precios en 2016 y 2017 de un11% y un 8% (en media anual) por encima de lo estimado a principios de 2016. Así, el beneficio estimado a primeros de año se reduciría a la mitad.
CUMPLIR CON EL DÉFICIT
Las administraciones públicas siguen aplicando una política fiscal ligeramente expansiva, por lo que el déficit de 2016 se reducirá tan solo UN 0,6%, hasta el 4,4% del PIB, por debajo del nuevo objetivo de estabilidad (4,6%), a pesar del elevado crecimiento del PIB. Para 2017 se espera que las cuentas públicas mejoren, pero en un escenario sin cambios en la política fiscal, el déficit se reduciría tan sólo hasta el 3,6% del PIB, y superaría el objetivo presupuestario fijado en el 3,1%.
En el próximo bienio, las medidas de política fiscal estarán condicionadas por la resolución dela Comisión Europea sobre el procedimiento de sanción por el incumplimiento de los objetivos de 2015.