A la hora de analizar un mercado, es importante considerar factores macroeconómicos, demográficos, la seguridad jurídica, entre otros, porque ayuda a proteger la inversión a largo plazo. En Inmsa recomendamos a nuestros inversores apostar siempre por un marco institucional sólido y predecible, y España, al ser la cuarta economía del euro, cumple ese requisito. A pesar del ruido político, el inmobiliario español sigue siendo uno de los primeros mercados del mundo para invertir”, explica el CEO de Inmsa, gestora americana de inversiones globales en Real Estate especializada en family offices y familias de alto patrimonio.
Otro de los argumentos para apostar por el mercado doméstico, es que la inflación, a diferencia de los tipos de interés, va a seguir subiendo. “El Banco de España estima que este año cerrará en el 3,6% pero el que viene se situará en el 4,3%, y en escenarios inflacionistas invertir en activos reales es una buena alternativa", afirma Capellino, quien también destaca que “las previsiones indican que la economía española crecerá en 2023 un 2,3% gracias al buen comportamiento del primer semestre del año y en contraste con otros países de nuestro entorno, como Alemania, donde la recesión es un hecho.
Mariano Capellino considera que los principales fondos de inversión del Real Estate van a seguir tomando posiciones en España, y pone como ejemplo los planes de Inmsa, que en 2024 también comenzará a gestionar inversiones para familias, family offices e instituciones españolas, ocho años después de abrir su oficina de Madrid. La compañía considera que el momento es “inmejorable” para obtener altas rentabilidades en un contexto de ajuste del mercado por la subida de los tipos de interés.