Al respecto, añadió que el Estado "no debe permanecer impasible ante las necesidades de las personas ni desentenderse de las respuestas".

Los servicios públicos, recordó, van a destinar 5.200 millones de euros a políticas activas y el Estado garantizará la continuidad de éstas "con las aportaciones que sean necesarias", precisó. "Si en estos momentos es importante la solidaridad con los parados, también es con los mayores", sostuvo el presidente, que repasó las subidas que su Gobierno ha hecho en materia de pensiones, del 30 por ciento en la anterior legislatura y del 6 por ciento para 2009.


En este sentido, recordó que la aportación del Estado para mejorar las prestaciones de menores ingresos es de 7.500 millones, lo que calificó de "formidable ejercicio de solidaridad".

Durante su intervención también repasó que el Gobierno ha subido en el último año la pensión media un 7 por ciento, hasta 815 euros al mes, y que durante 2009 aportará 8.000 millones de euros al Fondo de Reserva de la Seguridad Social, que actualmente se sitúa en 56.000 millones de euros, equivalente al 5,2 por ciento del PIB.

No obstante, señaló que la mejor forma de garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones es adaptarlo a la nueva realidad, algo que, en su opinión, se puede conseguir a través del diálogo social, que tildó de "joya de la corona del sistema económico y laboral".

Proyecto de renovación del Pacto de Toledo

En este punto, destacó que ya está en marcha el proyecto de renovación del Pacto de Toledo, del que espera salga un acuerdo que permita decir a la sociedad que el sistema de pensiones tiene un "horizonte de seguridad y certidumbre para las próximas décadas".

De la política social de su Gobierno, también incidió en la creación de la ley de Dependencia, que, en un momento de serias dificultades, "está permitiendo generar empleo".

Estas actuaciones permiten al Ejecutivo, subrayó, poder decirles a los desempleados y pensionistas que, ante las actuales circunstancias, "aquí está el Estado".

A Zapatero le precedió el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, quien dijo que la mejora del Pacto de Toledo supone "el compromiso de todas las partes en la defensa de la Seguridad Social y refleja que la sociedad está convencida de la necesidad de renovarlo".