Modestos avances para Solaria en la jornada de este martes, con una subida de un 0,11% hasta los 14,05 euros en el IBEX 35. El valor encadena su quinta sesión en positivo, mientras que si se echa el ojo a las últimas ocho sesiones, ha registrado subidas en siete de ellas, con un saldo positivo acumulado de un 11,90%.
No obstante, en lo que va de año Solaria registra todavía descensos de un 17,90%, con la capitalización bursátil en unos 1.750 millones de euros.
Los analistas mantienen la fe en un rebote a medio y largo plazo. Según el consenso recopilado por Reuters, de media las casas de análisis otorgan a Solaria una recomendación de ‘mantener’. El precio objetivo, de media, se fija en 18,92 euros, lo que implica un potencial alcista de un 34,5% respecto a la cotización actual.
Desde el punto de vista del análisis técnico, Diego Morín, analista de IG, señala que “después de perder más de un 30% desde los máximos anuales, el valor rebota algo más de un 11% hasta los 14 euros”. Solaria “busca consolidar este nivel, ya que se encuentra ante un último mínimo máximo importante (14,26 euros en octubre 2022)”.
El sector de las renovables está en el foco además después de que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico haya endurecido las condiciones para obtener la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) de proyectos fotovoltaicos, eólicos e hidroeléctricos.
No obstante, “no esperamos impacto” de esta noticia, señala Eduardo Imedio, analista de Renta 4. En la actualidad, el sector renovable español tiene pendiente la construcción de más de 60 GW de proyectos solares y eólicos cuya DIA fue aprobada el pasado 25 de enero, y que deberán entrar en operación en 2025. Adicionalmente, la nueva normativa tampoco se aplicará a los proyectos que hasta el pasado 15 de junio hubieran presentado la solicitud de impacto ambiental.
“Con un sistema eléctrico nacional con una potencia instalada total de 120,6 GW, el mercado se encuentra en una fase de digestión de los 60 GW aprobados, y cuya rentabilidad está actualmente en tela de juicio dado los vertidos de energía que se registran periódicamente”, señala el experto. “No esperamos por tanto que el endurecimiento en la tramitación de proyectos tan alejados en el horizonte temporal vaya a tener impacto en el sector a corto plazo”.