En abril de este año la aseguradora indicó que podría considerar "disponibles para la venta" sus participaciones en Repsol  y Sacyr en el caso de que los valores subiesen significativamente.

Desde el 2 de abril, fecha en la que Mutua expresó la posibilidad de desinversión, las acciones de Sacyr han subido en torno a un 23 por ciento, mientras que las de la petrolera lo han hecho un 35 por ciento.