Moody´s argumenta esta rebaja por la debilidad del perfil de crédito individual de los bancos lusos ante la cada vez menor capacidad del Gobierno de prestar asistencia al sistema fiannciero del país.

En concreto, Moody´s ha recortado uno o más escalones la calificación a largo plazo de siete bancos portugueses (Caixa Geral de Depositos, Banco Comercial Portugués, Banco Espírito Santo, Banco BPI, Banco Santander Totta, Caixa Economica Montepio Geral y Banco Portugues de Negocios).