Es el primer año de crecimiento de la economía italiana tras dos años en negativo, en 2009 el PIB decreció un 5,9%, mientras que en 2008 lo hacía un 1,3% en rojo, según datos del Instituto Nacional de Estadística italiano (Istat).

De este modo, el PIB italiano cerró 2010 en positivo, con un crecimiento del 1,3% superando las expectativas del Ejecutivo.