La Asociación que prepara el índice asegura que “después de haber alcanzado su mayor nivel en 6 años el mes pasado, en este descenso podrían haber influido aspectos como el aumento de los tipos de interés hipotecarios, que han comenzado a afectar al mercado”, refleja el informe. (Leer noticia)



A pesar de que sigue la temporada de resultados en Estados Unidos, las noticias empresariales no han tenido mucha importancia en el día de hoy, en comparación a los próximos días, con la avalancha de datos y noticias económicas que nos esperan. (Ver: Esta semana tenemos de todo, resultados empresariales, bancos centrales y macro)

Concretamente, mañana la confianza de los consumidor, el miércoles conoceremos el ADP de empleo, PIB y el ISM de Chicago. El jueves, además del desempleo semanal, conoceremos el ISM manufacturero, los pedidos de construcción y las ventas de autos, mientras que el viernes la clave serán los datos de empleo.

De entre todos los datos destacamos el dato de PIB y, desde luego, cualquier detalle que se conozca de parte de la Reserva Federal. El propio Ben Bernanke afirmaba hace unos días en su comparecencia ante el Congreso que la política de la autoridad monetaria dependería de datos como el desempleo. Por lo tanto, cualquier nuevo detalle será importante.

Pese a que nadie espera cambios en la política monetaria este miércoles, los mercados esperan señales sobre el momento en el que la FED podría comenzar a retirar su política de estímulos. En la actualidad su programa de compra de bonos del tesoro y papel hipotecario alcanza los 85.000 millones de dólares al mes. Este programa mantiene los tipos de interés a largo plazo cerca de mínimos históricos y ha sido crucial para la recuperación de la economía.

Por otro lado, según la consultora EPFR, durante la semana pasada siguieron saliendo fondos de los países emergentes con destino, en su mayoría a los países desarrollados. Es una tendencia que comenzó a realizarse a principios de año y que se ha repetido cada mes sin descanso. Los datos publicados por esta consultora esgrimen que el país que más ha sufrido la salida de fondos ha sido Brasil. (Leer noticia

En este contexto, la rentabilidad del bono estadounidense a 10 años ha terminado subiendo un 0,94% hasta colocarse en 2,59%. El precio del crudo ha concluído la cotización a 107 dólares por barril, apenas sin cambios.

Por último, el par EURUSD se ha mantenido en el nivel de 1,326. Ante la debilidad del dólar, los inversores han buscado una alternativa apostado por el oro, que ha cerrado la escalada con una subida del 0,58% hasta 1.329 dólares la onza.