Las bolsas europeas comienzan la sesión en rojo. El DAX alemán pierde un 0,23% en los 13.893,89 puntos, el CAC 40 se deja un 0,44% en los 6.481,93 y el FTSE 100 un 0,75%. El EURO STOXX 50 retrocede un 0,36% hasta los 3.795,25 puntos. El IBEX 35, por su parte, resta un 0,57%, en los 8.211 puntos. Solo sube Cellnex, un 0,03% en 30,98 euros. En rojo, las mayores caídas son para Bankinter, el 1,69% en 6,18 euros y para Caixabank, del 1,18% en 3,61 euros.
Las empresas más ligadas a las materias primas reciben hoy referencias menos favorables que al inicio de la semana, cuando la reapertura de China impulsaba su cotización. Dentro del DAX, las mayores caídas son para Fresenius, de casi el 1%. MTU Aero, Henkel y Deutsche Telekom ceden más del 0,5%. En la bolsa de Paris, Danone y Pernod Ricard lideran las caídas, con un retroceso cercano al 1%. En la bolsa de Londres, BT Group pierde un 2,52%.
En la sesión del miércoles, el sector tecnológico cayó un 0,9%, siguiendo las caídas de sus pares estadounidenses, ya que el aumento de los rendimientos presionó a las acciones sensibles a las tasas de interés, un tema recurrente este año. Las acciones tecnológicas han caído casi un 28,4% en lo que va de 2022.
Las acciones de la alemana Infineon cayeron un 1,5% en medio de movimientos más amplios en el sector tecnológico y después de que su presidente ejecutivo, Jochen Hanebeck, dijo que está dispuesto a gastar varios miles de millones de euros en el objetivo de compra adecuado en su búsqueda de adquisiciones. Hoy suben un tímido 0,29% en la apertura.
El regulador antimonopolio de Italia dijo el martes que abrió una investigación sobre la posible fijación de precios de los vuelos dentro y fuera de Sicilia por parte de aerolíneas como Ryanair easyJet y Wizz Air Las acciones de las aerolíneas cayeron entre un 1,2% y un 4%.
El temor a que los esfuerzos de los bancos centrales por contener la inflación provoquen una ralentización económica y la incertidumbre sobre la evolución de la economía china tras la supresión de los controles frente al COVID-19 han mantenido a los mercados a la baja. También persisten los temores a la inflación. "La primera impresión fue que la reapertura (de China) acabaría, si no por ser inflacionista, sí por frenar el descenso de la inflación", dijo Sam Stovall, estratega jefe de inversiones de CFRA en Nueva York. "Ahora, con un aumento de la demanda de materias primas y demás, eso podría poner un soporte bajo los precios y otra razón por la que la inflación podría acabar siendo más pegajosa".
El mes de diciembre no está cumpliendo con las expectativas generadas a priori, señalan los expertos de Link Securities. Históricamente es uno de los mejores meses para la renta variable occidental, mientras que en esta ocasión todos los principales índices bursátiles europeos y estadounidenses están cediendo terreno, con algunos como el Nasdaq Composite perdiendo más del 10% en lo que va de mes.
“Veremos si en las últimas dos sesiones del año cambia algo “la película”, aunque mucho nos tememos que la mayoría de los inversores ya han dado el ejercicio por cerrado y se mantendrán alejados de los mercados hasta la semana que viene”, señalan.
Preocupa el aumento de contagios en China
Las bolsas asiáticas se debilitaban ligeramente el jueves, tras un aumento en los casos de COVID-19 en China que inquieta a los inversores y siembra dudas sobre las posibilidades de una rápida recuperación de la segunda mayor economía del mundo, que ha iniciado la relajación de sus estrictas restricciones frente al COVID-19. El mercado está a la espera de ver cómo evoluciona la situación. El sistema sanitario chino se ha visto sometido a fuertes tensiones desde que Pekín comenzó a desmantelar su régimen de "cero contagios" frente al COVID-19 a principios de mes.
"A corto plazo, sigue existiendo el gran interrogante de cuánto tardaremos en superar este resurgimiento del COVID", dijo Moh Siong Sim, estratega de divisas del Bank of Singapore. "Pero a medio plazo (...). Creo que las perspectivas de crecimiento de China pueden ser más estables y menos accidentadas, y eso a su vez significa que el resto del mundo también podría beneficiarse de ello."
Las acciones chinas caían un 0,3%, mientras que la bolsa de Hong Kong cedía un 1%. El Nikkei japonés descendía más de un 1%, a mínimos de casi tres meses, mientras que el índice australiano S&P/ASX 200, basado en los recursos naturales, perdía un 0,94%.
En Wall Street, a la espera del paro semanal, la situación sigue siendo de pesimismo. El DOW JONES Ind Average perdió un 1,10% en los 32.875,71 puntos, el S&P 500 se dejó un 1,20% hasta los 3.783,22 y el NASDAQ 100 recortó un 1,32% hasta las 10.679,34 unidades. "No hubo aparición de Papá Noel este año. El Grinch llegó este diciembre para los inversores", dijo Greg Bassuk, director general de AXS Investments en Port Chester, Nueva York. Los futuros registran ahora ligeras subidas.
El jueves de la semana pasada, los datos de paro semanal, que fueron más sólidos de lo esperado, provocaron mayores caídas, al crecer los temores de una mayor firmeza por parte de la Reserva Federal en las alzas de tipos. Hoy se van a conocer las cifras de paro de esta semana, a las 14:30 hora española. En esta ocasión, podrían sufrir un ligero deterioro, al crecer de las 216.000 peticiones previas a las 225.000 previstas por los analistas.
El dólar recortaba parte de sus avances este jueves, después de que los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense a largo plazo subieran durante la noche, aunque los inversores se mantenían nerviosos de cara al final del año, también al desvanecerse el optimismo inicial sobre la reapertura de China. A primera hora de este jueves, el euro sube un 0,08% hasta los 1,0617 EUR/USD.
Los inversores en renta variable seguirán muy pendientes del comportamiento de los bonos, apuntan los analistas de Link Securities. “Mientras estos activos sigan mostrando debilidad y sus rendimientos continúen repuntando vemos muy complicado que las bolsas occidentales puedan volver a retomar su tendencia alcista”.
El rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años subía el miércoles, por tercera sesión consecutiva y revirtiendo una baja anterior, mientras los inversores medían el impacto que tendrá la política de reapertura de China sobre la senda de alzas de tasas de interés de la Reserva Federal. A esta hora, la rentabilidad se sitúa en el 3,85%.
En cuanto al petróleo, las perspectivas siguen siendo inciertas. Las recientes sanciones del G7 y las contramedidas del Kremlin no contribuyen a cambiar esta situación. A esta hora, los futuros del Brent pierden un 1,36% en los 82,89 dólares y los del West Texas un 1,22% en los 78,00 dólares el barril.