El diario se pregunta si la economía española podrá dejar el modelo de crecimiento basado en el sector inmobiliario y ser capaz de, en los próximos dieciocho meses, ponerse a producir bienes y servicios que se puedan vender al resto del mundo."Probablemente no, y por eso es por lo que España parece que va a sentir los más duro del parón económico actual", apunta el rotativo, que recuerda que los datos más recientes de inflación la sitúan en el 5,3% anual, la más alta en quince años.Los españoles están pagando, en su opinión, "no sólo sus propios excesos, sino el alcance mundial de los estragos producidos por la crisis del sector hipotecario estadounidense".