Endesa ha justificado este descenso, principalmente, a las medidas fiscales que entraron en vigor en España el 1 de enero, con un efecto de 145 millones de euros. En total, la suma de todos los impactos regulatorios y fiscales desde el inicio de 2012 han sumado 232 millones de euros en el primer trimestre de 2013, según ha precisado la compañía.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) de Endesa se situó en 1.682 millones de euros en el primer trimestre, lo que supone un descenso del 7,9%.
En España y Portugal, el beneficio neto de Endesa fue de 338 millones de euros, 137 millones de euros menos que en el primer trimestre de 2012, mientras que el Ebitda cayó un 6,6%, hasta los 971 millones, y el Ebit se situó en 505 millones de euros, un 23,3% menos.
En Latinoamérica, el beneficio neto de la eléctrica disminuyó un 5,5%, hasta los 138 millones de euros, con un descenso del Ebitda del 9,7% y una caída del Ebit del 11,5%.