El Tesoro Público ha cumplido con el objetivo de colocar entre 2.750 y 3.750 millones de euros al adjudicar el máximo previsto en bonos a distintos vencimientos pero que en todos los casos colocan sus rentabilidades en el entorno del 5%.

Ramón Forcada, director de Análisis de Bankinter, ya hablaba esta misma mañana de que, en esta ocasión, se trataba de ‘una cantidad más razonable’ y que, por tanto, no tendría porqué haber problemas en su colocación.

La subasta de bonos a tres años ha contado con un ratio de cobertura de 2,7 veces, superior al 2,1 registrado en la anterior colocación, con una rentabilidad que, eso sí, es la mayor registrada desde el año 2003: ha pasado del 4,270% el pasado 3 de noviembre al 4,848%. En total, el Tesoro ha adjudicado 1.200 millones de euros.

Respecto a los bonos con vencimiento en 2015, la demanda ha sido de 2,8 veces la oferta con un total colocado de 1.150 millones de euros y una rentabilidad que alcanza el 5,276%; mientras que en los bonos a cinco años la demanda aumenta espectacularmente, del 1,8 anterior hasta el 2,7, sobre todo, teniendo en cuenta que en las últimas subastas de este tipo, la demanda había caída por debajo del 2. Los 1.400 millones en bonos a cinco años han contado con un tipo de interés exigido del 5,544%.

La prima de riesgo se relaja después de la subasta de bonos pues se contrae hasta los 376 puntos básicos. Y cae también la rentabilidad del bono a diez años, lo hace un 2,9% abajo, hasta el 6,05%.

FUENTE: BLOOMBERG