Nueva jornada de pánico en las bolsas Europeas. El viejo continente amanecía cauteloso ante la batería de datos que llegarían de la sesión americana y ante la falta de referencias en Europa. Así, mientras el aluvión de datos macro iba dejando un sabor cada vez más amargo, las bolsas comenzaban a desplomarse de manera estrepitosa en una nueva sesión negra tanto para el Ibex 35, como para el resto de plazas bursátiles europeas.

Las solicitudes semanales de desempleo en EEUU aumentaron la semana pasada hasta las 408.000, esto es 9.000 más que la semana anterior. Además el dato del índice de precios de consumo sube en julio más de lo esperado mientras que las ventas de viviendas de segunda mano sorprenden en julio al retroceder un 3.5 % cuando se esperaba una subida del mismo porcentaje.

No ha ayudado el recorte sobre las previsiones económicas que ha hecho la entidad americana Morgan&Stanley; el miedo a que la recesión se convierta en un hecho ha vuelto a golpear con fuerza los mercados, en especial las entidades financieras.

Los recortes en Europa se mueven entre el 4% y el 5%

Las grandes entidades financieras españolas sufren un nuevo varapalo aunque logran aguantar los 6 euros, cota que BBVA ha llegado a perder en algunos momentos de la sesión. Al cierre la entidad presidida por Francisco González ha cerrado en los 6,1 euros tras un recorte del 5,76%.

Un poco mejor ha aguantado las sacudidas del mercado el Banco Santander al cerrar con recortes del 4% en los 6,28 puntos.

Los mayores recortes han sido para Abengoa. Los títulos de la compañía han cerrado en los 16,8 euros tras un recorte del 8%. En la hoguera también valores como ArcelorMittal, Sacyr Vallehermoso o Gamesa que recortan por encima del 7%.

A contracorriente encontramos tan solo un valor. Los títulos de Mapfre han cerrado la jornada con alzas del 0,5%.

El oro vuelve a servir de refugio en momentos de pánico. La cotización del metal precioso sigue cosechando récord tras récord. Hoy el metal amarillo ha cerrado en los 1.824 dólares lo que supone la primera vez que la cotización de este activo supera los 1.800 dólares por onza.