Esta evolución del mercado laboral arrancará en un contexto de contracción de la economía del 0,4% en 2010, que se verá lastrada por la caída del consumo y de las inversiones, y que no saldrá de la recesión hasta 2011 (+0,3%). El déficit público se mantendrá este año en los dos dígitos (-10,4%) para caer al 9,5% en 2011.

Así pues, este escenario es más pesimista que el que dibuja el Ejecutivo, que prevé una contracción del PIB del 0,3% en 2010 --una décima menos que la previsión del Citi--, una tasa de paro media del 19% y un déficit público para el conjunto de las administraciones del 8,1%.

Para el próximo año, el Gobierno también sería más optimista en sus previsiones, ya que espera un crecimiento de la economía del 1,8% y una tasa de paro del 18,4%. Además, el Ejecutivo ha anunciado que se empezará a crear empleo neto desde finales de este año y que el déficit se reducirá al 5,2% en 2011 gracias a los esfuerzos en el marco del plan de estabilidad presupuestaria.

LA POLÍTICA FISCAL SIGUE PENALIZANDO LA DEMANDA

Según Citi, el consumo interno seguirá sin levantar cabeza en 2010. La razón es que la política fiscal tensará la cuerda más de lo previsto durante este año y, además, el empleo descenderá un 3,3% en 2010 y un 0,2% en 2011.

Todo ello se traducirá en una contracción del consumo del 0,2% en 2010, que no volverá a tasas positivas hasta un año después, con una ratio del 0,3%. Además, las inversiones en contrucción seguirán cayendo, un 7% en 2010 y un 2,6% el próximo año.

LAS JOYAS DE LA CORONA

Por otro lado, la deuda pública, que el Gobierno sitúa como ejemplo de la solvencia de España, superará el 67,4% en 2010, por encima del 60% recomendado por las instancias europeas, y alcanzará el 76,5% en 2011.

Sólo el sector exterior 'maquillará' los balances nacionales, con una aportación positiva al PIB del 0,9% y el 0,5% en los dos próximos años. Concretamente, Citi prevé un crecimiento de las exportaciones en 2010 del 1,7% que se moderará en 2011, con una tasa del 0,7%, y, sobre todo, por una caída de las importaciones del 1,2% este año, en línea con el tono general de la economía, que se recuperarán el próximo año y crecerán un 1,3%.