Apertura con descensos en Wall Street, después de que los principales índices de la bolsa de Nueva York cerrase la sesión de ayer con ganancias, una vez que la Reserva Federal publicó las actas de su última reunión.
El banco central mantuvo los tipos de interés de referencia entre el 1,5% y el 1,75% pero consideró apropiado elevar "pronto" el precio del dinero, en línea con las previsiones de los analistas sobre el ajuste monetario. En cuanto al repunte de la inflación, que preocupa a los inversores, la Fed fue prudente y consideró "prematuro" concluir que vaya a permanecer a niveles del 2% tras estar años por debajo de esa cifra "de forma persistente".
Sobre los documentos, los analistas de Renta 4 destacan su tono más suave, sugiriendo que una inflación más alta no tiene por qué suponer necesariamente una aceleración en el ritmo de subidas de tipos. El mercado descuenta una próxima subida en el mes de junio, que sumada a la de marzo y a otra adicional esperada para el cuarto trimestre, supondrían un total de cuatro subidas de tipos de la Fed en 2018. Después de las Actas de ayer, la probabilidad de una cuarta subida se han reducido del 40% al 28% y la TIR10 años americana se sitúa por debajo del 3%.
Por otro lado, según publica hoy The Wall Street Journal (WSJ), el Gobierno estadounidense está estudiando la posibilidad de imponer nuevos aranceles a los vehículos importados. El diario dice que ese aumento estaría justificado por razones de seguridad nacional, amparándose en una disposición judicial conocida como Sección 232 y a la que ya recurrió para imponer nuevos aranceles a las importaciones de acero y aluminio.
El Journal citó a fuentes de la industria que han sido consultadas sobre estos planes. La Administración de Donald Trump está analizando las opciones que tiene y posiblemente al final terminará aplicando esos aranceles, según el diario.
En cuanto a los datos macroeconómicos, hoy se ha conocido que las nuevas solicitudes de subsidios estatales por desempleo en Estados Unidos subieron más de lo previsto la semana pasada. En concreto, las peticiones por desempleo aumentaron en 11.000, hasta las 234.000, según los datos publicados hoy por el Departamento del Trabajo. Así, el incremento está por encima de lo esperado por los analistas, que proyectaban un incremento hasta las 220.000 solicitudes.
Al otro lado del Atlántico también se conocerá el dato de abril de ventas de viviendas mensual, con una previsión de descenso del 0,9%.
Por su parte, los precios del petróleo siguen retrocediendo la posibilidad de que la OPEP comience a suavizar en junio los recortes de producción implementados, con el fin de contrarrestar una posible escasez de oferta por una menor producción de Venezuela e Irán. Así, el Brent de referencia en el Viejo Continente cae un 1,43%, hasta los 78,66 dólares por barril, al tiempo que el West Texas estadounidense se deja un 1,63%, hasta los 70,67 dólares por barril.
En el mercado de divisas, el euro se fortalece frente al dólar y se intercambia a 1,172 billetes verdes.
Así la cosas, en la apertura de la sesión el Dow Jones baja un 0,29%; el S&P 500, un 0,26% y el Nasdaq, un 0,10%.
Con el índice industrial en los en los 24.818,44 puntos, la mayor subida es la de General Electric, que rebota un 1,34% después de que en la sesión de ayer se dejase un 7,26%, tras unas declaraciones del CEO en las que exponía que los desafíos que enfrenta la compañía no desaparecerán en el corto plazo. Expuso que la demanda de turbinas de gas es débil y que las perspectivas no reflejan una mejora, aunque señaló que las áreas de aviación y las unidades de salud se mantienen fuertes.
A continuación, los mayores incrementos son lo de Verizon, del 0,54%, y de UnitedHealth, del 0,43%.
Por el contrario, las petroleras encabezan los descensos. Chevron pierde un 1,63% y Exxon Mobil, un 1,29%; por delante de Goldman Sachs, que se deja un 0,72%.
En el apartado empresarial destaca que Comcast ha comunicado que estaría estudiando el lanzamiento de una OPA por FOX. La oferta podría ascender a 60.000 millones de dólares, que pagaría íntegramente en efectivo. Comcast también tiene que competir contra Walt Disney, puesto que ya había sido pactada la venta de Fox a éste último por 52.400 millones. “La oferta de Disney, en caso de confirmarse la OPA, sería considerablemente inferior y sería abonado en acciones, sin embargo Murdoch (dueño de Fox) se habría mostrado conforme con esta oferta”, explican los analistas de Bankinter, quienes añaden que “el objetivo de esta adquisición para Comcast es incrementar su presencia en el mercado televisivo y competir tanto con Amazon como con Netflix”.