Caída de dos gigantes, Amazon y Alphabet ¿para cuando la recuperación?

El mercado no ha recibido con aplausos las cifras de resultados de Alphabet  correspondientes al tercer trimestre, más bien todo lo contrario. Y es que a pesar de que los números al inicio de la cuenta de resultados, esto es, en ventas, sí cumplen previsiones, con crecimiento del 6%, según se baja por la hoja de P&G la decepción va aumentando. El EBIT se queda escaso y el beneficio cae hasta un 26,5%, más de lo esperado. Todas las áreas de negocio muestran signos de debilidad, pero destaca YouTube y la publicidad, con fuerte caída de ingresos. Y no solo en el 3T22, sino que las previsiones pintan mal de cara a próximos trimestres. También en el negocio de la nube, con impulso del 37,6% pero por debajo de lo esperado. Como factores con impacto claramente negativo en las cuentas de Alphabet hasta septiembre destaca el aumento de costes (principalmente en I+D y en marketing) y la fortaleza del USD que juega en contra de su contabilidad de ingresos. Esto ha pesado mucho sobre los márgenes que se deterioran.

A favor hay que señalar que este gigante tecnológico tiene una posición de mercado muy robusta que le permite fijar precios y debería poder trasladar, sino todo, sí parte de la subida de costes al precio final de sus productos. Esto unido a un balance absolutamente solvente, con capacidad para afrontar más crecimiento sin tensiones de financiación. 

Caída de dos gigantes, Amazon y Alphabet ¿para cuando la recuperación?

Amazon también está sufriendo el impacto de la escalada de costes, más si cabe que su competidor ya que Amazon basa su negocio de venta en plataforma online en márgenes estrechos. Las ventas en el 3T22 han mejorado en un 15% las de un año atrás, frente a una estimación del mercado de +15,2%. El EBIT, en línea con Alphabet, cede un 48% y esta caída supera el deterioro que esperaba el mercado. También los beneficios se quedan escasos frente a previsiones. En síntesis, decepción también en márgenes, Cloud Computing +27% en ingresos, ligeramente inferiores a lo que esperaba el mercado y también peor de lo esperado las ventas en plataforma online.

Decepción por tanto en las cifras de resultados hasta septiembre, penalizadas principalmente por los costes como decimos y un tipo de cambio que igual que en Google, juega en contra de sus ventas.  que han forzado además una rebaja en la previsión para el cuarto trimestre del año. Ahora Amazon espera registrar ingresos por 140/148 mil millones de $, desde una cifra anterior de 155 mil millones; y EBIT estimado ahora para el último trimestre del año de 4 mil millones de $, desde la cifra anterior de 4,68 mil millones. La campaña de Navidad se espera floja, la más débil en la historia de Amazon. Además, parece que el gigante de la venta online se centrará ahora en mejorar su productividad y su eficiencia y dedicará menos esfuerzo a su plan de crecimiento. De hecho, este crecimiento, con aumento de capacidad, de salarios y de combustible ha sido uno de los lastres en sus cuentas hasta septiembre.

Hasta aquí la crónica de resultados y ¿qué ha hecho el mercado? Descontar las malas noticias, pero no ahora, sino que ya lleva tiempo revisando valoraciones. Después de la publicación ha sido la puntilla. Así, Alphabet cotiza ahora a 18,8v PER bajo estimación de BPA para el cierre de 2022 y 17,22v si calculamos este múltiplo bajo estimación de resultados para el cierre de 2023. Viniendo de PERs más elevados podríamos concluir por este criterio que Google empieza a estar a precio. Con un PCF de 12,3v para 2022e y 10,6v para 2023e la conclusión es la misma. Por EV/EBITDA menos de 10v descuenta el mercado, no parece cara. Si a esto unimos que su solvencia (con caja neta positiva) está a prueba de recesiones, nuestra recomendación bajo criterios de análisis fundamental para los títulos de Alphabet con horizonte de inversión de largo plazo es positiva. No está exenta de riesgo, que vendrá por la recuperación o no de la publicidad, y ya sabemos que la publicidad está fuertemente correlacionada con el dinamismo económico.  

Caída de dos gigantes, Amazon y Alphabet ¿para cuando la recuperación?

Por el lado de Amazon lo primero que salta a la vista mirando sus múltiplos es que el mercado espera un cierre con números rojos en 2022. Será en 2023 cuando el beneficio recupere sus niveles positivos, siempre que los costes se moderen, el consumo no sufra en exceso la contracción que busca la FED con su política monetaria y el USD afloje su escalada. Y a día de hoy, con los datos que tenemos y rodeados de mucha incertidumbre, los análisis macro apuntan a todo lo contrario. En síntesis, Amazon depende muy directamente de un consumo que debería seguir aflojando para moderar inflación, esto afectaría negativamente. Y si el consumo no se contrae tampoco lo hará la inflación y por ende, los costes. No hay camino fácil para Amazon a medio plazo. La recomendación bajo criterios de análisis fundamental por el momento es neutral para los títulos del gigante de ventas online. En su caso esperaríamos a confirmar resultados al cierre de 2022 y valorar expectativas para 2023.

Caída de dos gigantes, Amazon y Alphabet ¿para cuando la recuperación?

DISCLAIMER

Los datos, opiniones, estimaciones, previsiones y recomendaciones contenidos en este informe han sido elaborados por Estrategias de inversión y sus colaboradores con el objetivo de proporcionar a sus usuarios información sobre compañías, sectores y mercados financieros, sin que estas impliquen ni directa ni indirectamente una recomendación personalizada de la compañía o activos analizados a efectos de constituir un asesoramiento personalizado en materia de inversión. El análisis se basa en la elaboración de proyecciones financieras detalladas a partir de información pública y siguiendo la metodología del análisis fundamental tradicional. Dichos parámetros representan la opinión o estimación personal del analista. La persona que reciba este análisis deberá aplicar su propio juicio a la hora de utilizar dichos parámetros, y deberá considerarlos un elemento más en su proceso de decisión en materia de inversión. Esos parámetros no constituyen una recomendación personalizada de inversión.