La lectura es mucho peor de lo esperado. En concreto, los analistas había previsto un aumento de entre el 2,2 y el 2,5%. Además, refleja una fuerte ralentización respecto al trimestre anterior, cuando la tercera economía mundial creció 4,% a ritmo anual. Respecto al trimestre precedente el PIB de Japón creció un 0,3%, según el informe preliminar publicado hoy por la Oficina del Gabinete.

El gasto de los consumidores, que representa cerca del 60% del producto interior bruto nipón, aumentó tan solo un 0,1% entre abril y junio, mientras que la inversión pública creció un 1,7%. El gasto de capital de las empresas aumentó por su parte un 1,5%, según los datos del Gobierno.

El crecimiento menor de lo esperado de la economía de Japón el trimestre pasado se produjo en medio de una ralentización de las exportaciones del país asiático, afectadas por la incertidumbre en la economía global en medio de la crisis de deuda en la eurozona.