La tasa de inflación interanual en la zona euro se mantuvo sin cambios en abril, situándose en el 2,2%, mientras que en la Unión Europea experimentó una ligera moderación de una décima con respecto a marzo, alcanzando el 2,4% interanual, según datos publicados por Eurostat en su segunda lectura difundida este lunes.
En abril, el precio de la energía en la zona euro experimentó una caída interanual del 3,6%, en contraste con el descenso del 1% registrado el mes anterior. Por otro lado, el coste de los alimentos frescos aumentó un 4,9% anual, superando el 4,2% de marzo.
Los bienes industriales no energéticos se encarecieron un 0,6% interanual, manteniéndose en línea con el mes previo. Sin embargo, el costo de los servicios mostró un repunte significativo, con un aumento del 4%, en comparación con el 3,5% de marzo. Esta subida del 4% en los servicios representó el mayor incremento desde noviembre de 2024.
Al excluir el impacto de la energía, la tasa de inflación interanual en la zona euro en abril se situó en el 2,8%, lo que supone un aumento de tres décimas con respecto a marzo. Por otro lado, la tasa de inflación subyacente, que excluye además de la energía, los alimentos frescos, el alcohol y el tabaco, aumentó hasta el 2,7% desde el 2,4% registrado en marzo.
En los Veintisiete, se observaron tasas anuales más bajas en países como Francia (0,9%), Chipre (1,4%) y Dinamarca (1,5%), mientras que las tasas más altas se registraron en Rumanía (4,9%), Estonia (4,4%) y Hungría (4,2%). En comparación con marzo de 2025, la inflación anual disminuyó en trece Estados miembros, se mantuvo estable en tres y aumentó en once.
En el caso de España, la tasa de inflación armonizada en abril se mantuvo estable en el 2,2%, en línea con el promedio de la eurozona.
