La economía española registró  en el primer trimestre de 2016 un crecimiento del 0,7% intertrimestral, según CaixaBank Research. La cifra es una décima inferior al dato registrado en el cuarto trimestre del año 2015.

La economía española registra ya 11 trimestres consecutivos de crecimiento económico, impulsado por el buen comportamiento de la demanda interna.


A la par que el incremento del Producto Interior Bruto ha venido el proceso de reducción en la tasa de morosidad, que ha caído 2,4 puntos porcentuales en el último año hasta situarse en el 10,1%. Los segmentos que registran una mayor caída de la morosidad son el crédito a promotor (cuya morosidad cae 8,7 puntos porcentuales hasta situarse en el 27,5%) y la construcción (cae 26 puntos porcentuales hasta situarse en el 30%).



La deuda pública, por su parte, registró un descenso en el mes de enero, situándose en los 1,07 billones de euros. Las Corporaciones Locales y la Administración Central han reducido su nivel de endeudamiento en el último año, mientras que la deuda de las Comunidades Autonómas aumentó hasta el 24,2% del PIB (1,5 puntos porcentuales más que el año anterior).

Respecto al panorama internacional, el informe de CaixaBank señala que la producción industrial en la Unión Europea ha aumentado un 1,8% interanual, dos décimas por encima del registro obtenido en diciembre. En ese sentido, el informe hace referencia a la situación de Alemania, cuya producción industrial avanzó un 0,4% en el último trimestre respecto al mismo período del año anterior, cifra más positiva que la obtenida el pasado mes de diciembre, cuando cayó un -0,15%.

La mejora del mercado de trabajo mejora ha ido a la par de la recuperación económica en la Unión Europea. El empleo creció un 0,3% en los dos últimos trimestres del año 2015, mientras que los costes laborales se incrementaron un 1,6% interanual, una décima más que en el cuarto trimestre de 2014.

Por su parte, las decisiones tomadas por la Reserva Federal en su última reunión continúan en el foco de los analistas. Desde CaixaBank resaltan que la política monetaria de la Reserva Federal será más laxa, al señalar que la inflación registró un crecimiento del 1% interanual en febrero, cuatro décimas menos que en enero, mientras que la inflación subyacente se elevó hasta el 2,3%. Dado que los datos de inflación todavía se encuentran lejos del 2% pretendido por la FED, todo parece presagiar que finalmente se limitarán las subidas de tipos.