La economía española registró un crecimiento del 0,6% en el tercer trimestre del año, lo que representa una ligera desaceleración de una décima con respecto al trimestre anterior. Este menor avance se atribuye principalmente al comportamiento del sector exterior, que restó siete décimas al crecimiento, mientras que la demanda nacional, por otro lado, aportó 1,3 puntos al crecimiento económico durante los meses de verano.
El Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó datos de Contabilidad Nacional que muestran que el crecimiento interanual del Producto Interno Bruto (PIB) se situó en el 2,8% en el tercer trimestre, una décima menos que en el trimestre anterior. Esta cifra representa la tasa más baja en casi dos años, desde el cuarto trimestre de 2023. Además, se ha revisado a la baja en una décima tanto el crecimiento trimestral como interanual de la economía española en el segundo trimestre del año, situándose en el 0,7% y 2,9%, respectivamente.
Según el Ministerio de Economía, el crecimiento del PIB en el tercer trimestre confirma "el dinamismo de la economía española". Destacan que este es el noveno trimestre consecutivo con un crecimiento del 0,6% o superior del PIB en comparación con el trimestre anterior. La demanda interna fue el principal motor de crecimiento, impulsado por el consumo y la inversión, a pesar de un entorno de incertidumbre geopolítica y comercial a nivel internacional.
Durante el tercer trimestre, el gasto en consumo final de los hogares aumentó un 1,1%, reflejando un incremento en el ritmo de crecimiento en comparación con el trimestre anterior. Este aumento se atribuye a la solidez del mercado laboral y al aumento del poder adquisitivo de los hogares. Por otro lado, el gasto público experimentó un crecimiento del 1,3%, el mayor repunte desde el tercer trimestre de 2024, mientras que la inversión aumentó un 2,1%, la tasa más alta desde el último trimestre de 2024.
El Gobierno y diversas instituciones nacionales e internacionales prevén un crecimiento del PIB del 2,9% o superior en 2025. Se espera que España lidere el crecimiento entre las principales economías avanzadas, duplicando el crecimiento de la Unión Europea en su conjunto. Además, se proyecta un crecimiento del 1% al inicio de 2026, lo que genera confianza en empresas, inversores y trabajadores, posicionando a España como líder entre sus socios comunitarios.
El sector exterior tuvo un impacto negativo en el crecimiento del tercer trimestre, con una disminución del 0,6% en las exportaciones, rompiendo una racha de varios trimestres de incrementos. Por otro lado, las importaciones moderaron su crecimiento en siete décimas, situándose en un aumento del 1,3%.


