Carlos Dexeus, fundador y presidente de Altex AM, explica que comenzó en banca de inversión, trabajando en JP Morgan, después en Swiss Bank Corporation en España y más tarde en Barclays. Adquirió experiencia en corporate finance y el paso natural fue entrar en private equity. Creó un fondo en Swiss Bank Corporation que se convirtió en uno de los más importantes de España, junto con Mercapital, donde estuvo como consejero delegado bajo la presidencia de Juan Abelló. Más tarde regresó a Barclays, pero tras varias fusiones y compras comprendió que su futuro no podía depender de terceros, y decidió emprender.

En ese momento nació su interés por crear empresas. Primero fundó Netjuice, incubadora tecnológica junto a Rodolfo y otros socios, que atravesó dificultades pero terminó con éxito gracias a la venta de Kelkoo. Con los beneficios se planteó montar un family office, pero consideró que era demasiado joven y pensó en crear una gestora “y reinventar el mundo de la inversión”: Altex Asset Management. Entre medias, tuvo una breve etapa como director general de Inditex, tras ser invitado por Amancio Ortega, con quien había trabajado en transacciones financieras. Reconoce abiertamente que fue despedido porque no encajó en una compañía todavía muy familiar y poco preparada para un directivo externo.

En Altex, Dexeus ha seguido una filosofía clara: “lo que hemos intentado en Altex Asset Management es reinventar el paradigma de la inversión”. Su manera de operar se basaba en invertir primero su propio patrimonio en cada estrategia antes de ofrecerla a terceros. La propuesta de Altex trata de gestionar simultáneamente tres elementos: la selección de activos, las coberturas frente a caídas y la divisa, de forma que los resultados se entreguen en euros, independientemente de la evolución del mercado o del dólar.

Recuerda también la negociación de la venta de Kelkoo a Yahoo. Inicialmente la oferta fue de 250 millones de euros, lo que el consejo de administración veía como un éxito tras años difíciles para Internet. Sin embargo, él defendió que valía 1.000 millones y generó tensión negociadora con alternativas como una salida a bolsa o el interés de otros compradores. Narra cómo en medio de la negociación Google intentó hundir sus métricas cambiando el algoritmo, lo que usó para reforzar la presión sobre Yahoo, que finalmente cerró la compra. Define aquel proceso como uno de los periodos más divertidos de su vida profesional.

Otra faceta empresarial de Dexeus es la hotelera, surgida de un camping heredado por parte de su padre en Tarragona. Al ver el valor “extraordinario” de la ubicación, decidió invertir fuertemente para transformarlo en un resort de alto nivel. La clientela pasó de pagar 50 a 800 euros por noche en verano, con una mayoría extranjera. Posteriormente amplió con un camping en Fuengirola y proyectos en Valencia. 

Sobre el equipo de Altex, explica que está formado por 17 personas, con un alto porcentaje de ingenieros especializados en telecomunicaciones, matemáticas e industria. La gestora ha desarrollado algoritmos capaces de procesar 50.000 compañías y reducirlas a 300 candidatas para análisis humano. El criterio principal es identificar empresas en aceleración de crecimiento, con bajo endeudamiento y expansión orgánica. Afirma que el crecimiento es lo que más paga el mercado, aunque suponga comprar caro y tolerar volatilidad.

Altex también busca “democratizar" el acceso a la gestión profesional. Sus fondos pueden contratarse a partir de 1.000 euros, a través de la web, aunque todavía están en fase inicial de divulgación al gran público. Dexeus insiste en la importancia de que tanto grandes fortunas como pequeños inversores accedan a las mismas oportunidades, destacando que lo esencial es que los más ricos también los elijan, ya que eso genera confianza para el resto.

Explica que en el accionariado de Altex están él, su socio Enrique Valle y uno de sus hijos vinculado a inteligencia artificial. Rechazan dar entrada a terceros en el capital para mantener independencia.