El Banco de la Reserva Federal de Cleveland hace un seguimiento especial de la inflación en los Estados Unidos. Lo que hace más concretamente es una investigación profunda de la marcha de la inflación en el país. El pasado 13 de junio publicaron el resultado de su modelo por el que calculan las expectativas inflacionistas para los próximos años. Este modelo tiene en cuenta no solamente la rentabilidad de los bonos, también la rentabilidad del mercado monetario, los datos de inflación, los swap de inflación e incluso encuestas que ellos hacen en las que preguntan acerca de las expectativas inflacionistas a consumidores y a empresarios. 

Este modelo, que calcula la inflación media de los últimos 10 años, revela una fuerte caída en el mes de junio. Según analiza José Luis Cava, ha caído a la zona del 1,66%, “y lo que llama la atención es que ha caído significativamente porque en el mes de mayo fue del 2,16%”. Tal y como apunta el experto, el Banco de la Reserva Federal de Cleveland elabora también expectativas inflacionistas año a año para los próximos 30 años. Analizando la situación de los próximos años, asegura que, a partir de los 4 años, tiende a la zona del 2,5%

La conclusión a la que llega el analista es que la inflación va a caer, “sobre todo durante los próximos años” y la situación que se va a encontrar el país norteamericano es que va a tender “a la zona ligeramente por encima del 2%”.  

También estudia la situación inflacionista en nuestro continente. Asegurando que para 2024, la inflación tenderá a la zona del 2%, por lo que las expectativas inflacionistas en Estados Unidos y en Europa “apuntan al mismo escenario”. En cuanto a las expectativas inflacionistas medias elaboradas por el Banco de la Reserva Federal de San Luis a partir de la cotización de los bonos, ”también apuntan a un objetivo de inflación en torno al 2,2%. Por lo tanto, yo creo que este es el escenario al que nos dirigimos y que obligará por supuesto  a los Bancos Centrales a elevar su objetivo de inflación”.  

El experto echa la vista, como cada día, al S&P 500. En primer lugar analiza las consecuencias de la expiración de los contratos de futuro y opciones. “La gamma sigue siendo positiva, lo que favorece el movimiento al alza de las bolsas. Pero es menos positiva que la que había antes del viernes. Por lo tanto, es más probable que asistamos a una mayor volatilidad”. 

En segundo lugar, sitúa el precio de ejercicio en el que se concentran las opciones call que han comprado los participantes en mercados. “4.500, que lo vamos a considerar como un imán”. 

¿Dónde ha llegado el S&P 500? “A la zona alta del canal. Se ha parado justo al llegar ahí y ahora está experimentando una fase correctiva. Pero no hay muestras de que la tendencia haya dejado de ser alcista. Según José Luis Cava, esa tendencia cambiaría en los 4.250, “que es la parte inferior de esa recta directriz alcista”.

 

“Ayer no hubo novedades. El S&P 500, tras haber perforado el 4.413, se dirigió al soporte del 4.385. Ahí se ha movido lateralmente, algo normal. Nosotros creemos que lo más probable es que perfore ese nivel y se dirija al 4.350”. Por otro lado, si este soporte funcionase y el índice se coloca por encima en 4.413, el experto afirma que “intentaríamos abrir una posición larga”. “Si no lo recupera y sigue cayendo nos fijaremos cuando llegue la zona 4.352, pero no vamos a buscar el lado corto, sino que estaremos buscando el lado largo para intentar aprovecharnos de un segmento al alza que puede llevar al S&P 500 a la zona 4.500”, afirma el analista.