El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, anunció después de la reunión del Consejo de Gobierno celebrada ayer que mantendrá intacto el programa de flexibilización cuantitativa actual y que revisará su política monetaria en la próxima reunión de diciembre.
Draghi avanzó que estudia nuevas medidas de estímulo para avivar la economía de la zona euro y recordó que también se podrían aumentar los instrumentos de política monetaria actuales en caso necesario. El presidente del BCE añadió que aún no se han tomado ninguna decisión sobre los instrumentos a utilizar en los nuevos estímulos, "no se ha decidido nada, sólo se ha evaluado la situación".
En Estados Unidos, el número de personas que solicitaron nuevas solicitudes de beneficios por desempleo cayó por segunda semana consecutiva por debajo de lo esperado. El consenso de analistas apuntaba a que solicitarían 265.000 demandas, el dato final quedó en 259.000. Mientras que la media móvil mensual de solicitudes cayó hasta 263.250, su nivel más bajo desde diciembre de 1973.
Con el dato de ayer, la economía estadounidense encadena 33 semanas en las que las demandas de desempleo quedan por debajo del umbral de las 300.000 solicitudes, por debajo de este nivel se considera que el mercado laboral se mantiene en buena forma.
El hecho de que las empresas estadounidenses mantengan a sus trabajadores en un entorno de desaceleración económica mundial, implica fuerte confianza en los fundamentos internos y dejan la puerta abierta a la que Reserva Federal aumente los tipos de interés este año.
En la apertura de ayer, el euro se cambiaba por 1,1340 dólares y a última hora de la sesión se estaba cambiando por 1,1110 dólares. Durante la caída perforó el soporte semanal situado en torno a 1,12 dólares y terminó cerrando en un nivel de soporte clave para el corto y medio plazo.
En la zona de 1,1080 dólares, se solapan hasta tres referencias técnicas de soporte, la parte baja del rango lateral en el que cotiza el euro desde finales de agosto, su media móvil de 200 sesiones y un soporte semanal donde el euro ha marcados sus mínimos más recientes en dos ocasiones.
Por debajo de 1,1080 no hay referencias de soporte hasta la zona de los 1,0980 dólares, el siguiente nivel de soporte está situado en torno a 1,08, si acaba perdiendo este nivel de precios, no hay referencias de suelo hasta la zona de mínimos anuales, situados en el entorno de 1,05 dólares por euro.