Parece que una vez que hemos leído las actas de la última reunión de la autoridad monetaria en la que se decidió comenzar con la retirada de estímulos monetarios, la cosa parece más clara. Todo va a depender, y mucho, de la evolución de la inflación. (Ver
actas)

En la Reserva Federal utilizan, básicamente, dos indicadores para tomar las decisiones –además de la evolución del PIB-. Por un lado, la evolución del mercado laboral. Esto ha sido clave para tomar la decisión de iniciar la retirada de estímulos monetarios, es decir, comenzar con el tapering.

Con un desempleo aún elevado –en el 7%-, la economía puede sobreponerse al endurecimiento de la política monetaria. Sin embargo, no ocurre lo mismo con los tipos de interés.

La FED tiene dos objetivos, aunque parece claro que a partir de ahora no van a ser muy definitivos. El desempleo debe estar por debajo del 6,5%, algo que podría ocurrir este mismo año, según las proyecciones que hacen los propios miembros de la autoridad monetaria.

previsiones miembros de la FED


En la última reunión se discutió la posibilidad de rebajar el objetivo de nivel de desempleo hasta el 6%, la mayor parte de los miembros de la FED consideraron que lo mejor era dejar la cifra en el 6,5% establecido. Eso sí, tal y como quedó claro en la posterior rueda de prensa de Ben Bernanke, a partir de ahora ya no sólo se van a tener en cuenta las cifras de paro registrado, sino que se usarán otros indicadores.

También esperan que el objetivo de la inflación a largo plazo se sitúe por encima del 2%, algo que no parece tan sencillo en principio y que podría alcanzarse a finales de 2015.

Por eso Bernanke se empeñó en repetir una y otra vez, que las subidas de tipos se producirán “well past the time” (mucho tiempo después de que el paro se haya situado por debajo del 6,5%).

Si dependiese sólo del desempleo, la decisión de elevar los tipos podría producirse incluso este mismo año. Por eso todo el mundo cree, tal y como anunció Bernanke –sin dar fechas-, que se producirá a finales de 2015.

Hay que recordar que desde diciembre de 2008 los tipos de interés en EE.UU. se mueven en un rango muy cercano al cero, que va desde el 0-0,25%.

La mayor parte de los expertos creen que desde la primera subida podrían incrementarse en unos 200 puntos básicos.

Para los analistas de Barclays, que se basan en un análisis del comportamiento del mercado de renta fija tras la decisión del tapering, la mayor parte de las curvas todavía están manejando un escenario de retraso en la subida de los tipos, en la normalización. Y es que, en su opinión, los mercados están muy preocupados por las presiones bajistas sobre los precios.


inflación

Aunque podría pensarse que esta caída podría deberse a la evolución de los precios de la energía, recuerdan que la inflación subyacente –la que no tiene en cuenta la evolución de la gasolina-, tiene también el mismo sesgo de debilidad.

La razón que podría explicar este mal comportamiento de los precios se debe principalmente a la caída de los precios de los productos, sobre todo los que se destinan a la exportación. Y creen que todo está relacionado con la política monetaria de Japón que ha debilitado al yen en el mercado de divisas y que ha obligado a sus competidores en otras divisas a ajustar el precio de su producción para no perder competitividad.

Una tendencia que, los expertos, no creen que pueda cambiar en el corto plazo, sino que tenderá a revertirse en los próximos años. Es decir, justo el tiempo que se da la FED para elevar los tipos de interés.

tipos de interés