La nueva ley amplía la protección actual que se aplicaba solamente sobre el sector armamentístico y pretende evitar que fondos soberanos de países como China o Rusia puedan adquirir demasiada influencia en determinados sectores económicos. No obstante, el Gobierno germano apuntó que aplicará la nueva normativa sólo en casos "excepcionales".En concreto, el Ministerio de Economía contará con la posibilidad de examinar las compras realizadas por entidades extranjeras durante un periodo de tres meses y podría vetarlas en el caso de que representen una amenaza para la seguridad de Alemania.El ministro de Economía alemán, Michael Glos, declaró al diario germano 'Handelsblatt' que los temores a un incremento del proteccionismo en la economía alemana eran "infundados", puesto que la nueva ley es "muy modesta y sólo permite la intervención del Gobierno en unos pocos casos".