UNESID reunió a la industria siderúrgica para celebrar su XLVII Junta General Anual. En el evento, que contó con la participación del Ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, el presidente de UNESID, Gonzalo Urquijo, además de informar sobre la actividad en 2014 y la situación en estos primeros meses de 2015, presentó un paquete de medidas para el impulso a la industria.
Propuestas de UNESID para impulso a la industria, ante las próximas elecciones generales
Urquijo presentó un paquete de medidas que la industria siderúrgica considera fundamentales para el mantenimiento de la actividad en España, unas propuestas que UNESID eleva al Gobierno, partidos políticos e instituciones de cara al periodo electoral que arrancará en pocos meses, dando paso a una nueva legislatura que debería de ser la de la consolidación de la recuperación económica en nuestro país.
La siderurgia es clave en la economía española no solo por su contribución al empleo -60.000 puestos de trabajo-, y por su actividad exportadora -12% del saldo comercial no energético del país-, sino fundamentalmente por su condición de industria tractora de la cadena de valor, ya que no puede concebirse ninguna actividad industrial o de construcción sin el acero.
UNESID comparte la necesidad de reimpulsar la actividad industrial hasta representar el 20% del PIB y plantea para ello una serie de propuestas encaminadas a contribuir a ese renacimiento industrial. El paquete de medidas, que parte de la necesidad de mantener e impulsar la industria ya existente sin perjuicio de nuevas actividades que puedan desarrollarse en el futuro, recoge propuestas encaminadas a una mayor competitividad industrial y reclama seguridad y estabilidad jurídica, como las claves de ese impulso. En cuanto a política energética, se posiciona en que la siderurgia española necesita un precio de la energía competitivo, estable y predecible, y en política comercialhace hincapié en el acceso a los mercados y la defensa contra el comercio desleal.
El documento insta al reconocimiento legal del concepto de “material permanente”, fundamental para la economía circular en el caso del acero. Y en cuanto al comercio de derechos de emisión, plantea que las instalaciones más eficientes puedan disponer del 100% de derechos de asignación gratuitos, como incentivo a la mejora para el resto de instalaciones, y solicita la compensación del total de los sobrecostes indirectos derivados de la aplicación de la Directiva de forma homogénea con el resto de Estados miembros.
El paquete recoge también medidas concretas, como la solicitud de que las empresas sean las que gestionen la formación de sus trabajadores y puedan deducirla al 100%. También considera urgente y prioritario el aumento de la masa máxima de los camiones hasta 44 toneladas y en el capítulo de la innovación, señala el documento que deben continuar el apoyo a las plataformas tecnológicas porque son una herramienta fundamental para la competitividad del país.
En 2014 se recuperó el consumo, pero lo aprovechan las importaciones
Gonzalo Urquijo repasó el pasado ejercicio y comentó que las señales de la recuperación económica no lograron trasladarse a la producción siderúrgica, que se mantuvo en niveles del año precedente con 14,2 millones de toneladas de acero bruto, situando a España en el puesto 16 en el mundo, un ranking que sigue liderando China que supone la mitad de la producción mundial.
El consumo aparente de acero se recuperó en 2014 hasta 10,5 millones de toneladas, con un aumento interanual del 5,9%, equivalente al consumo del año 1996. Sin embargo, la presión de las importaciones impidió que la industria española se beneficiase completamente de esta mejora de la demanda.
“Los aceristas españoles –afirmó Urquijo- no tenemos miedo a la competencia leal y exportamos dentro y fuera de la UE en condiciones de libre concurrencia, pero no podemos aceptar que importaciones desleales invadan nuestro mercado añadiendo en algunas ocasiones grave riesgo para los consumidores”. En alusión a importaciones de China, -ese país exportó más de 88 millones de toneladas el año pasado, el equivalente al doble de la producción de Alemania-, a menudo en condiciones alejadas del mercado y sin reflejar los costes reales. UNESID ha colaborado con Eurofer en el planteamiento de expedientes de defensa comercial para proteger al mercado europeo de esa competencia desleal, motivada por la sobrecapacidad y amparada por las autoridades chinas.
El presidente aludió a la labor, en 2014, del Grupo de Trabajo del Acero –constituido por el Gobierno a solicitud de UNESID-, y que, salvo en el campo energético, está siendo muy positivo por lo que sería deseable que continuara operativo más allá de 2015.
Urquijo señaló que la política energética del Gobierno sigue siendo el punto más débil de la regulación industrial española ya que no es, como en el caso del comercio de emisiones, una política europea sino que el ámbito de actuación nacional es muy importante. Para Urquijo, “lamentablemente el Gobierno no ha tenido en cuenta la necesidad de nuestra industria de disponer de un precio energético competitivo, que sea estable, y una regulación predecible”.
La intervención también recogió la necesidad de que la nueva Comisión Europea aborde la adaptación del sistema de comercio de emisiones, teniendo en cuenta el impacto real que Europa tiene en el conjunto mundial, y señaló que es vital que la industria siderúrgica no se vea discriminada frente a sus competidores internacionales por los costes directos e indirectos del sistema de comercio de emisiones.
Una industria de la economía circular, la campeona del reciclaje
El esfuerzo exportador del sector permitió que la industria siderúrgica española reciclara 10,6 millones de toneladas de chatarra en 2014, participando en un ciclo que la convierte en uno de los grandes líderes europeos del reciclaje de acero –con Italia y Alemania-, y en el campeón en España por volumen sobre todos los demás materiales. La industria siderúrgica española tiene capacidad para reciclar toda la chatarra de acero que genera el país y además añade valor con total garantía medioambiental a los 5 millones de toneladas de chatarra que se importan del exterior.
El acero es un material con rendimientos de reciclaje prácticamente del 100%, comparable al de los metales nobles. Sus propiedades magnéticas facilitan su recuperación, independientemente de que haya sido recogido conjunta o separadamente, consiguiendo que se recicle casi todo el acero disponible.
Urquijo destacó especialmente la aportación de la siderurgia a la economía circular, manifestada por la excepcional reciclabilidad del acero y por la posibilidad de utilizar los subproductos de escorias siderúrgicas reduciendo el consumo de recursos naturales no reciclables. Señaló que en el ciclo de vida completo, incluida la utilización del acero en la cadena de valor, este es posiblemente “el principal exponente del concepto de economía circular”. Por lo que pidió que las administraciones públicas valoren esa aportación y eliminen las trabas administrativas a la utilización de los subproductos.
En 2015, se espera una ligera subida de la demanda
El presidente de UNESID repasó las tendencias que se van consolidando en el presente año 2015. Durante el primer cuatrimestre, el consumo aparente de acero apenas ha experimentado variación con respecto al ejercicio precedente de 2014. A pesar de ello, la evolución de los sectores consumidores sugiere un incremento de la demanda en este 2015. Las entregas al mercado, en el mismo periodo, es decir de enero a abril inclusive, también están muy estables, presentando incluso una ligera subida del 2,7% en referencia al pasado ejercicio.