Todas las personas, aún siendo completamente sanas, son portadoras de alguna enfermedad hereditaria. Cuando ambos padres biológicos son portadores de la misma enfermedad genética recesiva, hay hasta un 25% de posibilidades de que su hijo sea portador sintomático de esa afección, es decir, que padezca la enfermedad.

Por ese motivo, la clínica Ginefiv ha incorporado, dentro de sus servicios, un programa pionero de Test de Compatibilidad Genética para ayudar a conocer la compatibilidad entre los padres y disminuir la posibilidad de transmitir enfermedades hereditarias a su hijo. Desde un test básico para conocer las afecciones más prevalentes, como la fibrosis quística, hasta un estudio de genética exhaustivo que analiza las 300 enfermedades genéticas más frecuentes, con más de 35.000 mutaciones y  con peor pronóstico de salud. 

Aunque a priori no tengamos ningún síntoma, hay un riesgo real de poder transmitir alguna patología severa a nuestra descendencia. De hecho, cuando ambos progenitores son portadores de la misma enfermedad recesiva, la probabilidad de tener un hijo afecto es del 25%”, explica el Dr. García Sagredo, asesor del Área de Genética de Ginefiv, presidente de la Sociedad Europea de Citogenética, profesor de la Universidad de Alcalá de Henares y numerario del Sillón de Genética en la Real Academia Nacional de Medicina.

Gracias a este nuevo servicio, los pacientes pueden conocer su compatibilidad con más detalle a través de pruebas muy sencillas. “Tan solo necesitamos una muestra de sangre de los progenitores. Posteriormente, la analizamos en nuestro laboratorio para estudiar la compatibilidad entre ambos y disminuir los riesgos de cualquier patología en el futuro hijo”, afirma el Dr. García Sagredo.

Concebir un hijo sano ante una mutación genética

En el supuesto de que se detecte una mutación del mismo gen en ambos miembros de la pareja, hay opciones para concebir un hijo sano gracias a los últimos avances en el campo de la reproducción. Así, los futuros padres se pueden someter a una fecundación in vitro con un Diagnóstico Genético Preimplantacional (DGP) para aumentar las posibilidades de gestar niños sanos.

Gracias a esta técnica de diagnóstico, se pueden examinar los embriones obtenidos a través de la fecundación in vitro y distinguir las alteraciones genéticas y cromosómicas en los embriones, antes de su implantación en la mujer.

Para poder llevar a cabo este diagnóstico se utiliza la última tecnología. “A través de este método, mediante una biopsia embrionaria, extraemos entre 1 a 6 células de cada embrión para así examinar si porta alguna alteración. Al día siguiente a dicha extracción, podemos distinguir los embriones que no tienen alteraciones genéticas y que serán los que transferiremos al útero de la paciente”, explica el doctor.

Los expertos aconsejan realizar estas pruebas de compatibilidad antes de buscar el embarazo para conocer previamente los riesgos reales de transmisión de enfermedades genéticas a la descendencia, tanto si es por medios naturales como si es necesario a través de un tratamiento de reproducción asistida. De hecho, este test es aconsejable realizarlo antes de llevar a cabo un tratamiento con gametos procedentes de un donante, ya sea de óvulos o de semen, para poder seleccionar así a un donante que no sea portador de la misma mutación que el miembro de la pareja que aporta los gametos propios.

Puedes consultar más datos sobre la compatibilidad genética a través de este vídeo: https://www.youtube.com/watch?v=nLzeiRechq8

Ginefiv, 25 años de experiencia en Reproducción Asistida

La clínica Ginefiv es pionera en el tratamiento de esterilidad e infertilidad en España. Con más de 25 años de experiencia, ha ayudado a nacer a más de 15.000 niños y es la clínica que mayor número de casos trata en la Comunidad de Madrid. Entre sus logros está el nacimiento del primer bebé procedente de embriones congelados en Madrid en 1988 y el primer nacimiento tras una fertilización por Microinyección Espermática en 1996. Muestra de su amplia trayectoria, el centro fue reconocido como Mejor Institución Sanitaria del Año durante el 2013.

Ginefiv ha conseguido unas tasas de embarazo que pueden equipararse con los centros más prestigiosos a nivel internacional. De forma orientativa, la tasa de embarazo oscila entre el 45 y el 50% en técnicas de Fecundación in Vitro y Microinyección espermática, y entre el 15 y el 30% en técnicas de Inseminación Artificial.