Iberdrola vuelve a sorprender al mercado. La compañía ha fijado los términos y condiciones de un nuevo bono híbrido verde, por importe de 1.000 millones de euros, según ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El volumen de demanda y las condiciones de esta operación vuelven a demostrar la gran confianza del mercado y de los inversores en la solidez y solvencia de los planes de negocio y crecimiento de la energética. Esta operación servirá para mantener estable el volumen de híbridos vivo, tal y como avanzó en su plan estratégico presentado el pasado 9 de noviembre de 2022, ante el ejercicio de la opción de recompra de los 1.000 millones de bonos híbridos que ya emitiera en 2017.

Como el resto de híbridos de Iberdrola, el bono emitido es perpetuo, pero cuenta con una opción de recompra a la par a los 5 años y medio. Posteriormente, Iberdrola podrá recomprar el bono con periodicidad anual, coincidiendo con la fecha de pago del cupón.

Este ha quedado fijado en el 4,875%. Estas condiciones resultan muy ventajosas al tratarse de un instrumento subordinado. La última emisión de este tipo de deuda por parte de Iberdrola data de noviembre de 2021, con una cartera actual de 8.250 millones de híbridos. 

La compañía ha emitido 1.000 millones de euros, aprovechando las buenas condiciones de mercado, limitando riesgos de subidas de tipo de interés o un posible empeoramiento en los mercados de crédito. De este modo, Iberdrola continuará manteniendo una excelente salud financiera.

Además, los bonos híbridos computan como capital en un 50%, de acuerdo con la metodología de las principales agencias de rating, con lo que esta operación contribuye a mantener las calificaciones crediticias del grupo.

La demanda registrada ha reflejado el gran interés de los inversores de renta fija por Iberdrola, hasta alcanzar los 7.000 millones de euros, lo que supone 7 veces la oferta. Ello ha sido posible gracias a la participación de cerca de 360 inversores cualificados internacionales, principalmente europeos y de Reino Unido.

Los fondos obtenidos se utilizarán para refinanciar la operación análoga hecha en 2017 y continuará financiando los mismos activos que se financiaron con ella (parques eólicos onshore en Reino Unido).