MADRID, 23 MAY. (Bolsamania.com/BMS) .- En los países occidentales, el Producto Interior Bruto (PIB) es la principal referencia para analizar el grado de desarrollo de cada nación. Si el crecimiento del PIB es negativo, se produce la temida recesión, los inversores entran en pánico y las bolsas se desploman.
En cambio, hay países donde existen otros indicadores para analizar su grado de desarrollo. Es el caso de Bután, pequeño país enclavado en la cordillera del Himalaya y que se ha hecho famoso en todo el mundo por liderar la clasificación de la Felicidad Interior Bruta. Es decir, sus habitantes no son los más ricos del mundo, pero sí los más felices.
Sin embargo, según un artículo publicado por Al Jazeera recientemente, Bután expulsó a unos 100.000 butaneses de origen nepalí a principios de los 90, que han vivido en campos de refugiados durante las dos últimas décadas. “Después de todo este tiempo, Bután guarda silencio sobre su repatriación”, afirma el canal de noticias.
Al Jazeera afirma que estos campos de refugiados están vaciándose, pero que algunas de estas personas permanecen en ella, con la esperanza de volver a Bután. “Detrás de la facha de una nación pacífica, hay un estado que expulsó por la fuerza a una sexta parte de su población, un acto que ha sido descrito como una limpieza étnica sistemática.
C.P.O.
