El discurso reiterado de los bancos centrales sobre mantener las ayudas parece estar surtiendo efecto entre los inversores y animando las compras. Entre los analistas y el resto de protagonistas financieros existen varias interpretaciones en torno a la retirada de estímulo económico y a la subida de tipos de interés.
Aunque de momento, y hasta el 15 de junio, cuando está programada la próxima reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC), la inflación y el tapering acapararán la atención en los mercados.
La fecha en la que comenzará la retirada de estímulo sigue siendo una incógnita pero los inversores empiezan a considerar cuáles serán los sectores, a nivel global y del IBEX 35, que mejor reaccionarán ante una subida de tipos de interés.
Hasta ahora, debido al impacto del coronavirus en la economía global, la Reserva Federal optó por una política monetaria acomodaticia -dovish- con el fin de impulsar el crecimiento económico. Es cierto que tener algo de inflación anima al consumo si lo relacionamos con el sentimiento del consumidor en relación a la posible subida de precios pero el matiz negativo llega cuando el estímulo económico se mantiene en el tiempo más de lo debido. Pero, ¿qué es lo debido?
"El hecho de establecer una fecha para el inicio del tapering probablemente provoque un frenazo en seco que provoque caídas generalizas y arrastre a todos los sectores", piensa Carlos Gil, analista de trading de Estrategias de Inversión.
El analista explica que retirar las inyecciones de liquidez por parte de las entidades centrales provocará un freno para los mercados que están "dopados" .
En este sentido, es posible que se piense que la Reserva Federal, en lugar de beneficiar al estadounidense promedio, está imprimiendo billones para intentar apuntalar los mercados de valores compuestos, en parte, por empresas carentes de rentabilidad.
En concreto y si se habla de sectores, en caso de que la Fed, cuyo comportamiento se replica luego a nivel global, decida aumentar progresivamente los tipos de interés, las compañías cíclicas como bancos y aseguradoras se verían beneficiadas en este entorno.
En España, compañías como BBVA, Banco Santander, Banco Sabadell, además de Mapfre, Repsol, Aena, Amadeus, Acciona o Almirall, tienen más posibilidades de presentar un mejor comportamiento con la llegada del tapering, señala Sergio Ávila, analista de IG.
"En cuanto a las peor paradas, encontramos algunas utilities, telecos, ciertas tecnológicas y empresas de crecimiento con alta deuda, así como compañías de infraestructuras aunque, en este caso, el comportamiento negativo se puede ver contrarrestado por el gas", matizan desde IG.
Pablo Gil, estratega de mercados de XTB, sostiene que con el comienzo del tapering se producirá un primer impacto negativo global, pero luego "habrá una selección y un asset allocation por parte de los inversores cuando se clarifique que el nuevo marco es la retirada paulatina de estímulo".
En XTB coinciden con IG en cuanto a los sectores más beneficiados: bancos y aseguradoras. "Lo que más interesa a este tipo de compañías es que haya steepening -pronunciamiento- en la curva de tipos, es decir que se produzca un margen de intermediación grande entre el dinero de corto plazo y el de largo plazo", cuenta Pablo Gil.
En el caso de Europa, "no hemos tenido este pronunciamiento porque el BCE se ha esforzado en que los costes de financiación a largo plazo, por ejemplo, el bono a 10 años, se mantengan entre el 1 y el 0% y los tipos al 0%", sentencia Pablo Gil. Con esto, prácticamente se ha destruido el steepening en la curva, lo cual dificulta mucho que haya margen de intermediación que puedan explotar los bancos para ganar dinero.
En EEUU ese steepening está siendo una realidad desde hace bastantes meses. De ahí que la banca estadounidense lo haya hecho mucho mejor que la banca en Europa, aclaran desde XTB.
Carlos GIl, por su parte, apuesta por los sectores que se mueven en sintonía con la evolución de la economía. "Cuando las cosas van bien, se construyen más inmuebles, infraestructuras -que hay que financiar- y los ciudadanos salen y consumen más", argumenta refiriéndose a sectores de construcción, manufacturero, financiero y turístico. Extrapolando el tapering al Ibex 35, Carlos Gil se decanta igualmente por acciones ligadas al ciclo económico.
Mientras, en el otro lado de balanza, los valores tecnológicos podrían verse afectados, según comenta el analista de trading de Estrategias de Inversión y añade que el tapering es algo negativo para las bolsas y los bonos pero "fortalecería al dólar".
En un escenario de fuerte crecimiento económico a pesar de que haya una retirada de estímulo monetario, explica Sergio Ávila, las compañías cíclicas pueden seguir recuperando beneficios tras la pandemia y podrían verse beneficiadas, "al igual que las empresas de valor".