Prosegur, que durante el primer semestre registró un incremento en sus ventas del 3,9% y una progresión del beneficio bruto de un 5,4% y del 4,2% en el beneficio bruto, tiene un modelo de negocio basado en la orientación del cliente, control de la gestión, la rentabilidad. Con el “Plan 2011” pretende, además de conservar sus principales armas,
consolidar las compañías adquiridas y abrir nuevas plataformas de expansión.

La estretegía de la compañía y su buena puesta en práctica parecen convencer a los brokers, que esta mañana subían su precio objetivo. Prosegur ha despertado en la jornada de la “cuádruple hora bruja” con las
recomendaciones positivas de Deutsche Bank y UBS, que elevan su precio objetivo hasta los 31 y 32,5 euros, respectivamente.