Iberdrolaobtuvo un beneficio neto de 1.644 millones de euros en el primer semestre del año, lo que arroja un incremento del 16,6 % con respecto a un año antes, de acuerdo con las cuentas remitidas por la eléctrica a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El resultado bruto de explotación (ebitda) se situó en 4.990 millones, el 12,5 % más, debido a la evolución de los negocios en Estados Unidos, México y Brasil y a la aportación del parque eólico marino alemán Wikinger, que compensan la menor contribución de los negocios de redes y renovables en España y de comercial en Reino Unido.
Eleva previsiones
La compañía eleva además su previsión de beneficios para todo 2019 a niveles de dos dígitos.
En cuanto a inversiones, los 3.000 reflejados en los primeros seis meses del año, se trata de la mayor cifra de inversión en la historia de la cotizada del Ibex 35. De ellos, el 48% fue destinado a energía renovable y un 40% a redes reguladas de transmisión y distribución.
Iberdrola asegura que el 75% de los 5.250 nuevos megavatios (MW) que entrarán en funcionamiento este año, lo harán en la segunda mitad del 2019, por lo que calcula que a este ritmo podría superar el objetivo de alcanzar 13.000 MW adicionales en 2022.
Por otra parte, Iberdrola se mantiene como el mayor emisor de bonos verdes corporativos con 4.000 millones emitidos en el primer semestre, lo que le ha permitido reducir el coste medio de su deuda en seis puntos básicos, hasta el 3,43%, y situar su ratio deuda neta/ebitda en 3,67 veces.
