En la asamblea extraordinaria celebrada por Fortis en Bélgica el 2 de diciembre no hubo el quórum exigido para adoptar esa decisión (50% del capital), por lo que se convocó una nueva reunión para el próximo día 19, jueves, que ya no requiere un mínimo de asistencia.
Pero tras la sentencia del Tribunal de Apelación de Bruselas que anuló las decisiones adoptadas en octubre por la dirección de Fortis que condujeron a su fragmentación y exigió que se consulte a los accionistas al respecto, la entidad es partidaria de unificar todos los asuntos en una sola asamblea.
En respuesta a una demanda de un grupo de minoritarios, la corte bruselense suspendió, hasta que lo autoricen los accionistas, las decisiones que llevaron al despiece del grupo bancario y de seguros y a la venta del grueso de sus activos al Estado holandés y a BNP Paribas y ordenó la convocatoria de una junta extraordinaria antes del 12 de febrero.
En línea con el fallo judicial, Fortis anunció hoy la incorporación de un nuevo punto en el orden del día de la reunión del jueves, para posponer hasta la próxima asamblea general el pronunciamiento sobre la continuidad de las actividades del grupo.
Pero si los accionistas se manifiestan en contra del retraso, votarán a continuación sobre el futuro de la entidad.
El Gobierno belga y la Sociedad federal de participaciones e inversiones ya han anunciado que presentarán sendos recursos contra la sentencia del Tribunal de Apelación de Bruselas que ha paralizado la operación de venta del grueso de los activos bancarios y de la división de seguros de Fortis en Bélgica a BNP.
El ejecutivo insiste en que la venta al banco francés es la mejor opción para garantizar la viabilidad de las actividades bancarias del grupo.

