Rebote espectacular, subidas sin precedentes, alegría desbordada y ganas de que las tornas vuelvan a su ser. Los inversores han despertado con energía y deseosos de recuperar el terreno perdido durante la semana pasada –el Ibex35 cayó un 21% en sólo cinco días, lo que ha provocado cierta demora en la cotización de algunos títulos del selectivo por el notable volumen de órdenes compradoras. El mundo financiero se pone de acuerdo para elaborar un plan común que haga frente a la crisis y Europa ha dejado a un lado la batalla a uno para salir del atolladero. Europa se dio cuenta de que sería un esfuerzo estéril y ya tenemos un plan común porque el mercado necesitaba una acción unívoca y concertada. Los gobernantes de los países del Eurogrupo permiten la
refinanciación bancaria “ilimitada” hasta finales de 2009 y “en las condiciones del mercado” porque hay que devolver la confianza a los mercados e inyectar toda la liquidez que estos puedan necesitar. Después de la determinación del G7, los jefes del gobierno de la zona euro desarrollan un plan coordinado con suficiente flexibilidad para que estado miembro pueda adaptarlo a sus necesidades. Medidas basadas en el denostado plan de rescate británico. El Royal Bank of Scotland
ha aceptado antes de la apertura el plan de ayuda de Gordon Brown para incrementar su liquidez en 20.000 millones de libras, mientras que Barclays finalmente recurrirá a sus accionistas mediante una ampliación de capital. Entre tanto, el Banco Central Europeo(BCE), junto con el Banco de Inglaterra y el Banco Central de Suiza han decidido llevar a cabo medidas adicionales para mejorar la liquidez a corto plazo a un tipo de interés fijo que se establecerá antes de cada operación y que se realizará en subastas en dólares a un plazo de 7, 28 y 84 días. Medidas esperadas y necesarias que –de momento- logran apuntalar al Ibex35, que recupera un 4,75% hasta los 9.424 puntos.Gráfico Ibex35

