El estudio, realizado en 25 países de la Unión Europea, concluye además que estos retrasos en los pagos generarán en las empresas 250.000 millones de euros en costes adicionales cada año.

Respecto a los plazos de pago en Europa, en el sector de los servicios profesionales el 62% se realizan dentro de los 30 primeros días, el 27,7% entre 30 y 90 días y el 10,3% a partir de 90 días.

Por tipos de pagadores, el sector público retrasa sus pagos una media de 16 días, frente a los 11 días del sector privado o los ocho días de los particulares. 

El estudio elabora además un ranking de mejores y peores pagadores, siendo los países del Sur de Europa, como Portugal, Grecia y Chipre, los países que más retrasan sus pagos, mientras los países escandinavos, como Finlandia, son los más rápidos a la hora de afrontar sus deudas.

Respecto a la visión de esta situación por parte de las empresas, España junto con Hungría, Irlanda y Portugal son los países que se mostraron más pesimistas a la hora de cobrar sus deudas durante 2008.

Las pérdidas empresariales derivadas de la concesión de créditos alcanzaron en Europa los 34,7 millones de euros en 2008 y se prevé que en 2009 aumenten hasta los 42,5 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 35% respecto a 2007.

El director general de Intrum Justitia, Luis Salvaterra, explicó que "en los últimos años las empresas obtenían cuantiosos beneficios y no se preocupaban por el tema de los impagos" y apostó por "mejorar los protocolos de la gestión de crédito de las empresas" como la única manera de "sobrevivir".