Mientras tanto, en este año, Enel tendrá que afrontar la compra a Acciona del 25% de Endesa, que le dará el control del 92% del accionariado de la eléctrica española, en un ejercicio en el que espera ganar 4.000 millones. Sin embargo, la compra a la constructora de esa participación, valorada en 11.107 millones de euros, de los que 8.218 millones se pagarán en efectivo y el resto en activos de energías renovables, no elevará la deuda de la compañía.

A cierre de 2008, el endeudamiento financiero de Enel ascendía a 49.967 millones de euros, pero gracias a la ampliación de capital de hasta 8.000 millones de este año, el grupo confía en reducir su deuda hasta 45.000 millones a finales del ejercicio. Además, Conti destacó que su principal accionista, el Ministerio de Economía y Finanzas de Italia acudirá a la ampliación, garantizada por un sindicato de bancos, y que hará posible que la compañía mantenga su actual calificación crediticia (A-).

Así, Enel se preparará para cuando se produzcan los primeros signos de mejoría de la economía y los mercados financieros, porque por ahora no piensa en hacer nuevas adquisiciones ni en vender su participación en Eufer, la sociedad conjunta con Unión Fenosa Renovables. Según las previsiones del grupo italiano, ingresará 10.000 millones de euros hasta 2010 con la venta de activos renovables que al igual que la ampliación de capital contribuirán a que su endeudamiento siga bajando hasta los 41.000 millones en 2013.

Con ese nivel de deuda, la compañía cree que podría mejorar su calificación crediticia del A- actual hasta A. Además, con su plan estratégico para los próximos cinco años, el resultado bruto de explotación (EBITDA) podrá llegar a los 16.000 millones de euros en 2010 y a los 18.000 millones en 2013. Todo ello, insistió Conti, beneficiará a los accionistas de la compañía, para los que Enel propondrá el pago de un dividendo total a cuenta del ejercicio 2008 de 0,49 euros por título, de los que 20 céntimos ya se abonaron en noviembre pasado.

Y a partir de 2009, la compañía aplicará una nueva política de dividendo basada en un "pay out" del 60% del beneficio ordinario. Preguntado por los cambios que hará la compañía italiana en el consejo de administración de Endesa, Conti rehusó a hacer comentarios al respecto y dijo que habrá tiempo para discutir la nueva composición del órgano de gobierno de la compañía.