Las consecuencias económicas de lo que supone un precio del crudo que ya ha llegado a superar los 147 dólares saltan a la vista. Para empezar, el repunte del oro negro se lleva casi todas las culpas de que suframos una inflación descontrolada. Pero esta coyuntura de precios del petróleo en máximos no es mala por definición, al menos si le damos la vuelta a la tortilla y miramos hacia las compañías beneficiadas. Las primeras que llegan a nuestra mente son, sin duda, las petroleras. Compañías como la hispano argentina
Repsol-YPF, Total
, Eni, BP o Royal Dutch sobre las que Citigroup acaba de elevar precios objetivos -a la vista de que ahora cuentan con mayor potencial-. Pero en este universo de “beneficiadas” las que más brillan en lo que llevamos de 2008 son, sin duda, las compañías que realizan las infraestructuras petrolíferas y las que se encargan de buscar crudo más lejos, en realidad más hondo: a gran profundidad bajo el mar.Buscar crudo es rentablePara Javier Ruiz, gestor de Metagestión “mientras el precio del crudo siga en niveles elevados el negocio de estas empresas seguirá boyante”. Por motivos evidentes: a las petroleras les resulta rentable invertir en nuevas plataformas y en la extracción de nuevos pozos -de cara a aumentar su producción- si el oro negro se mantiene por encima de los 85 dólares. Y vaya que si los supera! El repunte del oro negro que, al margen de factores especulativos, está ligado a la pujanza de las economías emergentes –sobre todo de China- hace que “las empresas que ofrecen servicios de exploración, producción y refino de crudo y gas disfruten de un momento de fortaleza histórica en su actividad y sus pedidos”, asegura Ofelia Marín Lozano, jefa de análisis de Banca March. Y, dado que la demanda de crudo sigue al alza, la bonanza de estas compañías tiene visos de prolongarse durante varios años más. En concreto, Diego Escribano, director de gestión de Fortis Banca Privada, tiene claro que “es un sector para estar en los próximos 10 años” y destaca que “su principal riesgo es un desarrollo fuerte y un mayor peso de las energías alternativas”. En todo caso, subraya que “ahora mismo el petróleo es el camino más fácil y más barato”.Auxiliares europeasTras asumir que un “cierto recorte del precio del oro negro a corto plazo” podría permitirnos “mejorar el nivel de entrada en este tipo de compañías”, las recomendaciones de Marín Lozano en este sector pasan por la noruega Aker, la francesa Geophysique, la española Técnicas Reunidas o la británica John Wood. Esta última, con un 74 por ciento de sus ingresos procedentes de países emergentes. Algunas de ellas, caso de la gala, cuentan con el añadido de que están especializadas en la extracción de crudo en aguas profundas, uno de los negocios que mayor auge está cobrando en los últimos tiempos, dada la dificultad para encontrar petróleo de fácil extracción. Pero en Francia, la auxiliar petrolífera más conocida es Technip. Una compañía que, según Pablo Suárez, gestor de renta variable de Inversis Banco, “se centra mucho en el tema marítimo y está más floja en terrestre”. Los expertos de Inversis tienen para esta compañía, que diseña y construye las factorías en las que se procesan los productos petrolíferos, una recomendación de neutral. Ahora mismo, esperarían para tomar posiciones en Technip hasta que baje hacia el nivel de los 47,50 euros, cuando su precio objetivo estaría en torno a los 65 euros. Idéntico consejo –el de esperar a nuevas cesiones para comprar- ofrecen desde este banco para la holandesa Fugro, una compañía ligada también al sector, pero con un “modelo de negocio innovador”, señala Suárez. ¿La razón? Se dedica a la recolección de datos geográficos y sísmicos para ayudar a las extractoras a llegar mejor a los pozos, una actividad en la que es líder mundial. Pese a que “cuenta con una buena gestión y una interesante cartera de pedidos” no se escapa al mal tono de la bolsa, de manera que este gestor de renta variable de Inversis banco aconseja no tener prisa y entrar en el valor en la zona de los 44 euros. Respecto a la italiana Saipem, Pablo Suárez destaca que “su negocio está focalizado sobre todo en Italia, Argelia, Nigeria y la península Arábiga y que da servicio de perforación marítimo y terrestre”. Sitúa su precio objetivo en torno a los 32 euros y considera que los 24,20 serían un buen nivel de entrada desde el punto de vista técnico. Auxiliares estadounidensesEs en EE.UU. donde encontramos mayor número de auxiliares petrolíferas cotizadas. Si nos concentramos en las de tamaño moderado –capitalización bursátil entre 4.000 y 10.000 millones de dólares-, los expertos de Banca March se decantan por Pride Internacional, por Exterran Holdings - que alquila barcos y plataformas petrolíferas que permiten perforar los fondos marinos en aguas profundas- y por FMC Technologies. Esta última, suma en el último año más de un 70 por ciento, frente al 13,6 por ciento de Pride Internacional, según datos de Bloomberg. Otra de las alternativas en un sector donde, según Escribano, “hay que estar sin duda”, es Baker Hughes (-5,6 por ciento en el último año), pero también Key Energy Services, una de las preferidas de Inversis Banco. Esta última se centra en los servicios de producción de energía sólo en tierra y es líder en cuanto a torres de perforación en EE.UU. Alquila maquinaria, da servicios de bombas de presión, de cableado eléctrico, etc… y presenta, a juicio de Pablo Suárez, muy buenas perspectivas de futuro. Este experto aconseja entrar en el valor en la zona de los 16,5 dólares. Pero, en este ramillete de compañías ligadas a la extracción de crudo “made in USA”, sobresalen dos gigantes: Halliburton y Schlumberger. La primera, que acaba de renunciar a hacerse con la británica Expro Internacional, “cotiza a ratios de compra”, según Juan Carlos Castillo Montero, director de análisis de Capital Bolsa. Este experto destaca que el precio objetivo de consenso para la compañía se sitúa en torno a los 60 dólares -frente a los 47,99 actuales- y que “el escenario para la industria en la que trabaja es muy positivo”. Además, cree que la contratista estadounidense “se va a beneficiar del crecimiento de las infraestruturas de países como China o Brasil, en los que está muy presente”. En el último año, Halliburton –presidida durante 5 años por el que fuera vicepresidente estadounidense, Dick Cheney- se revaloriza en bolsa más de un 40 por ciento. La segunda, Schlumberger, es la opción favorita de Diego Escribano, de Fortis. Subraya el hecho de que su PEG (que se obtiene de dividir el PER entre el porcentaje anual de crecimiento en beneficios esperado) es de 1,14 a doce meses vista. Es decir, “no está excesivamente cara”, concluye. El PEG de Halliburton estaría, en cambio, en 1,20. El director de gestión de Fortis Banca Privada destaca de Schumberger-especializada también en la búsqueda en aguas profundas- que “está especialmente centrada en Oriente Medio, África y Europa del Este” y espera que sus resultados mejoren en la segunda parte del año, para seguir aumentando márgenes en 2009. Teniendo en cuenta las buenas expectativas que se manejan para Schlumberger -los analistas de S&P le otorgan un precio objetivo de 113 dólares-. Escribano cree que “sus ratios son bastante razonables”. Técnicas Reunidas, la opción españolaLa única representante española en el sector de las auxiliares petrolíferas es Técnicas Reunidas, una de las pocas que logra un saldo anual positivo en lo que llevamos de 2008. Uno de sus puntos fuertes es, a juicio de José Lizán, analista de Nordkapp, el hecho de que “cuenta con una cartera de pedidos que le garantiza el negocio para varios años y con unas sólidas perspectivas de crecimiento”. De momento, hasta marzo ha ganado un 35 por ciento más y ha incrementado sus ingresos un 32 por ciento. Otro de vientos que soplan a favor de Técnicas Reunidas es que se trata de una compañía muy bien gestionada, sólida y que siempre ha cumplido con sus previsiones -alrededor de un 71 por ciento de su cartera al final de cada año se ejecuta en el siguiente ejercicio-. Este buen hacer le ha servido para ganar en dimensión y para convertirse en una candidata clara a la hora de adjudicarse buenos contratos. El último, por 325 millones de euros para el suministro y construcción de una central de generación en Arabia Saudí. Al hablar de contratos, los analistas destacan una característica que le viene muy bien a Técnicas Reunidas: el hecho de que el 43 por ciento de los mismos sean de los llamados open book, en los cuales el margen del proyecto se acuerda entre el contratista y el cliente, con lo que son mucho más flexibles. Argumentos que hacen que uno se fije en Técnicas Reunidas y que se completan con su impresionante revalorización desde que saliera al parqué. Debutaba hace poco más de dos años, el 21 de junio de 2006, a 17 euros por acción. Desde entonces ha subido en torno a un 180 por ciento.