Pese a todo, la media de mayo será la menor de sus diez años de historia, en torno al 1,65 por ciento, tras los mínimos marcados en marzo y abril, del 1,909 por ciento y del 1,771 por ciento, respectivamente.

Los analista consultados por EFE consideran que estos repuntes no implican un cambio de tendencia en la evolución del indicador, que en el últimos doce meses ha perdido más de tres puntos porcentuales al pasar del 4,820 por ciento de abril de 2008 al 1,613 por ciento de hoy.

Según los expertos, el euríbor ha moderado la pronunciada racha bajista que sigue desde que, en octubre, el Banco Central Europeo (BCE) se decidiera a modificar su política monetaria y recortara los tipos de interés en la zona euro para aumentar la liquidez en el mercado de crédito.

Julián Benavente, de Capital Market, explica que los repuntes de ayer y hoy "corrigen ligeramente" el ritmo del descenso, aunque asegura que a mitad de año el indicador estará en el entorno del 1,5 por ciento.

Al frenazo en el ritmo de descenso hay que sumar, prosigue Benavente, la certeza de que el BCE no va a recortar en junio los tipos en la zona del euro y cierto sentimiento en los mercados respecto a las medidas "no convencionales" adoptadas por el banco en mayo para facilitar aún más el acceso de las entidades a la liquidez.

Los inversores consideran, puntualiza el analista, que estas medidas "se han quedado un poco cortas", y existe además cierta incertidumbre respecto a lo que ocurra en el futuro, ya que no hay unanimidad en el seno del consejo directivo del BCE.

Así mismo, recuerda Benavente, no hay que olvidar lo fuerte que se encuentra el euro frente al dólar.

Ignacio Cantos, de Atlas Capital, precisa que la situación actual, con los tipos de interés al 1 por ciento "no se ha visto nunca antes", con lo que los mercados no tienen referencias.

El analista tranquiliza a las familias endeudadas, ya que está convencido de que el euríbor se situará antes del segundo semestre del año en el 1,5 por ciento, aunque las pequeñas subidas de estos días indican claramente que "todavía existen tensiones en el mercado interbancario".