El descenso del beneficio es especialmente pronunciado debido a que Credit Suisse registró el año pasado un excelente trimestre, gracias a las excepcionales condiciones de mercado y a la ausencia de rebajas de valor. En su proyección, el banco señaló que el mercado seguirá difícil y que gestionará el negocio de manera "conservadora". Comparado con su rival UBS, Credit Suisse ha conseguido limitar los efectos de la crisis crediticia. Por su parte, UBS registró tres trimestres consecutivos de caídas y se ha visto obligado a buscar 29.000 millones de francos en fondos nuevos para hacer frente a las pérdidas relacionadas con la crisis.