"Las condiciones del mercado siguen sin cambios con bajos rendimientos ante la presión de los precios y el impacto de unos recargos por combustible más bajos", destacó la compañía.

British Airways registró un descenso del 2,9% de los pasajeros transportados en los vuelos domésticos y europeos y del 17,7% en el caso de los enlaces hacia Asia-Pacífico. Por contra, las rutas a América y a África y Oriente Próximo registraron un aumento del 3,4% y del 3,9%, respectivamente.

En cuanto al factor de ocupación, la aerolínea británica se situó en el 81,3%, lo que supone un aumento de 2,4 puntos porcentuales con respecto al mismo mes de 2008.

British Airways recortó en septiembre un 3,7% su oferta --asientos por kilómetro ofertados (AKO)-- y registró un descenso del 0,8% el tráfico medido en ingresos por pasajero y kilómetros. La carga, medida en kilómetros por tonelada, registró un descenso del 2,6%.

La aerolínea atribuyó este resultado a la caída del 7,9% del tráfico en clase 'business', frente al 0,7% en clase turista, fundamentalmente por el descenso de la demanda de este tipo de billetes desde mediados de septiembre de 2008, a raíz de la quiebra de Lehman Brothers.

En los seis primeros meses de su ejercicio fiscal --que finaliza en marzo--, de abril a septiembre, British Airways transportó un total de 10,9 millones de pasajeros, un 3,5% menos que en el mismo periodo del año anterior. El factor de ocupación de la compañía aérea entre abril y septiembre se situó en el 80,6%, 1,1 puntos porcentuales más.