La compañía que preside Florentino Pérez explica que sin considerar el impacto de Abertis, el beneficio neto disminuye un 15,7% en un periodo excepcional afectado por la pandemia de la COVID-19. "Esta evolución confirma la solidez y diversificación de los negocios operativos del grupo", defiende ACS en su comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El beneficio bruto de explotación (ebitda) ha alcanzado los 1.994 millones de euros, un 17,1% menor que el año anterior. Sin considerar la contribución de Abertis, el beneficio bruto de explotación del resto de actividades se reduce únicamente un 7,4%. Igualmente, el beneficio neto de explotación (ebit) se sitúa en los 1.282 millones de euros, un 22,4% menos que el año anterior. Sin considerar Abertis, disminuye un 8,4%.
Los ingresos de ACS en los primeros nueve meses de 2020 han alcanzado los 27.204 millones de euros, lo que supone una reducción del 5,5% como consecuencia de las medidas sanitarias en relación a la COVID-19 implantadas desde mitad del mes de marzo en la mayoría de los países.
En concreto, la evolución de la producción durante el tercer trimestre muestra una caída del 11%, con mayor incidencia en las regiones de Asia Pacífico y Europa. Los ingresos en América del Norte representan un 51% del total, Europa un 20%, Australia un 17%, Asia un 5%, América del Sur un 6% y África el restante 1%. Los ingresos en España suponen un 13% del total.
Por países, Estados Unidos, Australia, España, Canadá y Alemania contribuyen con un 80% del total de las ventas.
La cartera a septiembre de 2020 se sitúa en 73.494 millones de euros, un 5,3% menor que el año pasado debido al impacto del tipo de cambio, principalmente del dólar americano que se ha devaluado un 8%; ajustado por el efecto divisa la cartera total del Grupo se mantiene prácticamente estable respecto al año anterior.
ACS presenta al cierre del tercer trimestre de 2020 un saldo de deuda neta de 3.448 millones de euros, equivalente a 1,3 veces el ebitda anualizado del grupo. Esta cifra es 2.212 millones de euros mayor que hace un año tras haber afrontado los pagos derivados de la salida de Bicc por parte de Cimic (1.080 millones de euros), incrementar el volumen de inversiones operativas (1.311 millones de euros) y financieras, y aumentar la autocartera en ACS y Hochtief aprovechando la volatilidad del mercado de capitales.
En concreto, en los últimos doce meses, ACS ha destinado 626 millones de euros a la distribución de dividendos y, adicionalmente, 429 millones de euros a la compra de acciones propias para el pago del dividendo flexible de 2021. Por su parte Hochtief también ha abonado durante los últimos doce meses 564 millones de euros en concepto de dividendos y compra de acciones propias.
Las inversiones netas totales de ACS hasta el tercer trimestre de 2020 han ascendido a 867 millones de euros: las inversiones operativas netas han ascendido a un total de 365 millones de euros y corresponden a la adquisición de maquinaria y equipamiento para los diversos proyectos del grupo, principalmente en las actividades de minería, obra civil e instalaciones industriales.
Las inversiones financieras y en proyectos han superado los 894 millones de euros, entre las que destacan: 525 millones de euros en Infraestructuras, incluyendo el incremento de la participación en Cimic por 190 millones de euros y la inversión en proyectos de energía por parte de Servicios Industriales por un importe de 370 millones de euros.
Las desinversiones se sitúan en 392 millones de euros, y corresponden principalmente a la venta de diversas autopistas por parte de Iridium y la operación de venta de activos de energía renovable.