Sin embargo, la visión tradicional de que el efectivo preserva el capital, los bonos generan ingresos y la renta variable es la que proporciona el aumento del ahorro ha quedado superada.
Explican que, por ejemplo, las materias primas, el sector inmobiliario y los bonos, por ejemplo, han servido muy bien para las estrategias de crecimiento. Ahora, además, se podrían tener en cuenta otras estrategias como apuestas long/short (largos/cortos), o estrategias multialtivos, que suelen funcionar bien a largo plazo.
Cuando hablamos de ingresos, recuerdan en la entidad que las rentabilidades actuales de los bonos son mucho más bajas de lo que solían ser. Por eso dicen que los inversores deberían ampliar su universo y pensar en estrategias flexibles multiactivos, por ejemplo.
Em general, lo que aconsejan en Nuveen, la firma de Bob Doll es “no invertir necesariamente en activos que intenten superar o seguir las rentabilidades de un activo o de un índice. En su lugar, necesitan carteras que puedan conseguir razonablemente los objetivos que buscan”, afirman.
En principio asegura que es importante centrarse en los objetivos principales del inversor, aunque es igual de importante considerar la gestión del riesgo durante la construcción de la cartera. Esto incluiría evaluar la capacidad de soportar la volatilidad y posibles caídas y también cómo las diferentes condiciones del mercado pueden afectar al resultado de una estrategia. “En otras palabras –dicen en la compañía de Bob Doll-, la gestión del riesgo puede evitar o reducir la posibilidad de que no se cumplan los objetivos del inversor”, aseguran.
Explican que en el contexto actual “los bajos tipos de interés han hecho que muchos se pregunten cómo manejar el riesgo de una subida de tipos y las bajas rentabilidades de los bonos. La respuesta sería un cambio desde las estrategias más normales en la asignación en las carteras de bonos a otras soluciones menos tradicionales”, aseguran.
En su web Bob Doll pone varios ejemplos y se refiere a tres inversores imaginarios. Una de ellas tiene una cartera orientada al crecimiento y estaría preocupada por los riesgos de corrección y la subida de tipos de interés.
En Nuveen le proponen considerar poner algo de su dinero en acciones que paguen dividendo. “Aunque esta inversión podría conllevar riesgos relacionados con la subida de tipos, hay una relación histórica entre la rentabilidad positiva y la subida de tipos en este activo”.
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