La compañía ha destacado que estos resultados se deben a la "buena marcha" de sus negocios y a la "exitosa gestión" en el acuerdo de expropiación de YPF. Esta "fortaleza" de los negocios permitió a la petrolera compensar el efecto de la parada coyuntural en Libia.
Al cierre del primer semestre, Repsol contaba con una deuda neta de 2.392 millones de euros, un 55,4% menos que en el primer semestre de 2013.
La compañía destaca además que dispone de una "elevada liquidez", del orden de 11.195 millones de euros.
Dentro del área de exploración y producción ('upstream'), la actividad exploratoria permitió incorporar durante el semestre nuevos proyectos de explotación de hidrocarburos en Brasil, Estados Unidos, Rusia, Perú, Bolivia y Trinidad y Tobago. Además, Repsol realizó el mayor descubrimiento de los dos últimos años en Rusia. En todo caso, esta división del negocio registró unos resultados de 400 millones de euros en el semestre, lo que supone un descenso del 36,9% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.
La producción de hidrocarburos alcanzó durante el primer semestre del año los 340.000 barriles de petróleo equivalente al día, después de sumar 26.800 barriles nuevos al día de producción, que compensan la pérdida coyuntural de actividad en Libia y las paradas de mantenimiento en Trinidad y Tobago. La tasa de reemplazo de reservas se situó en el 275%, lo que supone el porcentaje más alto de la historia de la compañía. El descubrimiento anunciado en Trinidad y Tobago se suma a la incorporación de 240 millones de barriles recuperables en Rusia.
"Rentabilidad del downstream"
Repsol destaca la buena marcha de este área. El margen de refino experimentó un significativo incremento, del 9,4% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, lo que refleja la fortaleza de los activos en un momento de presión sobre esta área de negocio.
La calidad de los activos de 'downstream' ha permitido elevar un 29% el resultado de esta división, hasta 452 millones de euros. Esta mejora se suma al incremento del 11,5% en el resultado procedente de la consolidación de la participación en Gas Natural Fenosa, hasta 282 millones.
Durante el semestre, Repsol abonó a sus accionistas un dividendo extraordinario de 1 euro por acción, al que se sumó el dividendo complementario pagado mediante la fórmula de 'scrip dividend'.