Tras la emisión lanzada por el Tesoro Español, llegan las interpretaciones. Una emisión que "e ha acogido de forma muy psoitiva “de hecho lo hemos visto en los mercados de renta variable y además también ha sido bien recibido en el mercado de divisas. En cuanto a la colocación es cierto que ha sido a un tipo superior al de emisiones anteriores pero lo importante es que ha sido a un precio inferior al de subastas anteriores y es lo que ha permitido que el mercado lo recoja de forma positiva”.

Dentro de la renta fija hay otras oportunidades más provechosas en el binomio rentabilidad- riesgo. High Yield, renta fija emergente u otro tipo de fondos de renta fija con mayor flexibilidad nos pueden dar rentabilidad interesante sin asumir demasiados riesgos. La exposición a la deuda española no lo haríamos a través de fondos pues “veremos que por el efecto precio podemos tener problemas y las ventas masivas pueden afectarles”.

En términos de rentabilidades son elevadas frente a otro tipo de activos. El riesgo reside en que “no se está cotizando demasiado alto el riesgo de impago. Siempre llegan comentarios sobre compra de bonos de China, incrementos y mejoras en los fondos de ayuda de la UE….factores que ayudan y que dan a entender que habrá un cierto respaldo por parte de las organizaciones y eso ayuda a que se tenga éxito en estas colocaciones”.

En Estados Unidos las políticas que han tomado son bastante agresivas y la pregunta sería ver si ellos están interesados en reducir su deuda. En este caso, EEUU no sólo ha hecho políticas expansionistas – que le ha permitido debilitar al dólar frente a otras monedas- sino que ha colocado al billete verde como moneda patrón que le han permitido tener un sector exterior bastante fuerte.

Respecto a la economía alemana – que ha anunciado esta semana un crecimiento del 3.6% del PIB- hemos visto que ha publicado datos muy fuertes “y que ponen de manifiesto la fortaleza de su economía”. Un país que está muy orientado al sector exterior y países emergentes. El sector industrial, consumo cíclico, sector ligado al lujo en compañías como BMW “que cuenta no sólo con la exposición al mercado del lujo sino también a los países emergentes, como China”.

En Europa del Este si invertimos a través de fondos tienen mucho peso en Rusia, lo cual es lógico porque es una de las economías más imporattnes. Ha tenido muy buen comportamiento en el último año – dirigido por el sector petrolero- pero el resto de economías emergentes de la UE “a pesar de que tienen cifras macroeconómicas están más expuestas a temas de deuda periférica y pueden tener algún tipo de sobresalto”. Este experto apostaría por Rusia “a quién le puede seguir ayudando la subida del petróleo a través del fondo DWS Russia”.

Quizás en España no haríamos un fondo de renta variable española con alta rentabilidad por dividendo pues estaríamos bastante restringidos. En Europa, ING Europe High dividend “que elige entre las compañías que tengan una buena rentabilidad por dividendo aquellas con mayor potencial de revalorización”. Como complemento para una cartera puede ser una buena idea.

Respecto a la guerra de los depósitos y fondos de inversión, Hernando reconoce que “hay ciertas categorías que contra los depósitos lo tienen complicado – monetarios y renta fija corto plazo, principalmente”. En cuanto a las ventajas, una de ellas es la fiscalidad pues “el diferimiento de los benefiicos mediante el traspaso a otro tipo de fondos es algo que no tienen otros instrumentos de inversión”. Además la liquidez “en los años más duros de la crisis hemos visto cómo los reembolsos que se podían hacer en los fondos no han mermado la liquidez”. Desde el punto de vista de gestión, los fondos permiten acceder a otros mercados, activos, sectores con los que un depósito no puede competir.

Para 2011 vemos un año positivo en la renta variable. El crecimiento se está haciendo extensible a la mayoría de países y desde el punto de vista empresarial se está focalizando la atención en los países emergentes. Si bajamos el nivel de riesgo “iríamos a buscar fondos mixtos flexibles que buscarán rentabilidad positiva sea cual sea la situación del mercado, como el BNY Mellon Real Return, que ha tenido bastante flexibilidad y ha conseguido durante muchos años rentabilidades bastante positivas.