“No vamos a modificar nuestro objetivo de inflación hasta que la inflación caiga por debajo del 2%”. Esto es lo que ha dicho el presidente del Banco de la Reserva Federal de Chicago. Este hecho revela claramente el sentir de los miembros del FOMC, señala José Luis Cava. ¿Pero a costa de qué? “A costa de enviar la economía de Estados Unidos a una recesión. Pero que además tienen la cara dura, si me lo permiten, de decir que es muy probable que se consiga un aterrizaje suave”. 

Está es la razón, en definitiva, por la que está subiendo la rentabilidad de los bonos a largo plazo. “Está subiendo, en primer lugar, por el comportamiento irresponsable fiscal del gobierno de Estados Unidos. Biden está gastando como si no hubiera un mañana. Y para financiar sus enormes gastos, necesita emitir un tsunami de deuda pública”. 

Además, continúa el analista, los participantes en los mercados de bonos saben que la Fed va a incrementar el objetivo de inflación, “porque cuando se fijó el del 2%, la situación de la economía era muy diferente a la situación actual”. Y luego, finalmente, el experto se fija en que están flaqueando los últimos compradores de bonos, que eran los fondos de pensiones, principalmente. 

Cava avisa que están apareciendo las primeras grietas en el mercado laboral. “Ahora nos encontramos que el sentimiento de los consumidores estadounidenses se ha tornado negativo”. Según el resultado de las últimas encuestas que se han realizado, se observa que los consumidores estadounidenses están desacelerando su gasto, especialmente en aquellos que tienen todavía pendientes de pago sus préstamos estudiantiles. 

“Estos consumidores que tienen todavía pendientes de pagos préstamos estudiantiles ya tienen comprometida el 82% de su renta disponible. Por lo tanto, ¿qué más van a gastar? Debemos considerar a como escenario más probable que el consumo se va a frenar, que van a restringir en los regalos de Navidad, que van a comprar menos ropa, menos viajes…” 

Para representar esto, José Luis Cava se fija en los dos ETFs que representan fundamentalmente al sector minorista en Estados Unidos. En primer lugar, se fija en el ETF que tiene como nemónico XRT, que recoge la inversión en empresas del sector minorista. 

Tras experimentar una fuerte caída, luego se ha movido lateralmente durante un largo periodo de tiempo por encima del soporte de la zona 55,8. ¿Qué sucedería si se perforase el soporte de la zona 55,8? “Que habría una caída muy significativa”. En cuanto al otro ETF, que recoge también el comportamiento del consumidor estadounidense, tiene como nemónico IYC. 

“Este ETF recoge la inversión en empresas que distribuyen comida, en las empresas distribuyen fármacos y productos al por menor en general. Tras la fuerte caída, en vez de moverse horizontalmente, se ha movido al alza. La razón es sencilla, es porque en este  ETF participa Amazon y, claro, Amazon ha subido con mucha fuerza. ¿Qué sucedería si el 67 fuese perforado y si el 55,8 fuese perforado? Se produciría un desplome”. 

De este modo, el economista llega a la conclusión de que el consumidor norteamericano  está al borde del colapso, “está al borde de un precipicio. Y por lo tanto, la tesis del aterrizaje suave resulta muy improbable”. 

En cuanto al S&P 500, el analista apunta que llegó ayer al 4.320, lo intentó perforar, se paró en el 4.298 y ahora ahí se está moviendo lateralmente. “Recuerden que en el 4.300 es donde está el muro de las opciones put, que es un soporte muy importante”. 

¿Qué espera Cava? “Nosotros esperamos que, si el S&P 500 fuese capaz de construir un movimiento lateral, una base entre 4.320 y 4.298, muy probablemente intentaría dirigirse a esa resistencia de la zona 4.377-4.382. Mientras se mantenga por debajo, nosotros mantendremos también una predisposición bajista”.  

Para acabar, el experto recuerda que el collar de JP Morgan vence este viernes. “¿Saben  ustedes cuál es el precio de ejercicio de la put comprada? 4.210. Por lo tanto, la zona  comprendida entre 4.210 y 4.256 es un soporte muy importante, a la vez que un imán”.