Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos, ante la confusión que se desprende de la nueva Ley 7/2022 de 8 de abril de residuos y suelos contaminados para una economía circular, reclama al Gobierno, a través del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que "rectifique inmediatamente" para aclarar si es posible efectuar quemas agrícolas.

En concreto, la organización agraria explica en un comunicado que esta norma se contradice en dos artículos muy diferentes al excluir de su ámbito en una de ellos la paja y los materiales naturales no peligrosos de origen agrario y forestal y, por otro, regulando cómo se deben eliminar y prohibiendo su quema con carácter general.

Unión de Uniones señala que esta contradicción está provocando confusión y que haya zonas donde se traslada dicha prohibición a los agricultores y en otras se permiten las quemas habituales en esta época del año.

La organización apunta que la propia directiva marco de residuos y la guía de la Comisión Europea para su interpretación señala como material natural no peligroso y que, por lo tanto, deben quedar excluida de su regulación como residuos la paja de cereales y otros cultivos, la hierba cortada, la madera natural, recortes de madera, virutas y serrín de madera y otra biomasa.

Por otro lado, Unión de Uniones señala que estas prácticas de quema están ya "perfectamente reguladas" por la reglamentación de condicionalidad ambiental de la UE, así como por las normativas estatales y autonómica que la desarrollan.

De esta forma, pide al Departamento que lidera Teresa Ribera y al de Luis Planas que dejen claro mediante una interpretación oficial que los restos de cultivo y de poda no pueden ser considerados residuos, sino material vegetal que se gestiona en la propia explotación.