Los sindicatos ELA, LAB, Steilas, ESK, Etxalde e Hiru han reunido este domingo a miles de personas en las tres capitales vascas para mostrar su rechazo a la reforma laboral y para reclamar un marco propio de relaciones laborales.

Las manifestaciones, que han partido a las doce del mediodía, han contando con el respaldo de decenas de colectivos sociales para denunciar que la reforma acordada por el Ejecutivo central, CCOO, UGT y CEOE "no es la que necesitan las trabajadoras y los sectores populares".

Junto a las centrales sindicales, han tomado parte en las protestas organizaciones juveniles, colectivos de pensionistas, así como movimientos feministas, antimilitaristas, ecologistas, antirracistas e independentistas, que han coreado lemas como "Esta reforma es un atraco", "Aquí trabajamos, aquí decidimos" o "Reforma laboral, derogación total".

La más numerosa de las movilizaciones se ha llevado a cabo en Bilbao, desde la Plaza Moyúa tras una pancarta con el texto "Lan erreforma honi ez! (No a este reforma laboral). Por el marco vasco de relaciones laborales", firmada por los sindicatos convocantes, para recorrer la Gran Vía y finalizar en la Plaza del teatro Arriaga.

Al inicio de la manifestación, el responsable de negociación colectiva de ELA, Pello Igeregi, ha reclamado una reforma laboral "de verdad", que no sea una convalidación de la reforma de Mariano Rajoy, ha advertido al Gobierno central que no puede plantear "chantajes", ni exigirle a la oposición que no cambie "ni una coma de esa reformilla que ha aprobado en Madrid", y que la patronal "no puede ser quien vaya a implantar los márgenes de las negociaciones".

Asimismo, ha defendido una negociación "de verdad", que aborde los problemas "fundamentales" de la población trabajadora vasca, que cambie el despido "fácil y barato", y que pueda mejorar las condiciones de trabajo que "se imponen en los convenios de Madrid". Ante ello, ha asegurado que el voto en contra el próximo jueves es el "más eficaz, el que va a asegurar que se vuelva a discutir y que va a permitir que se haga una reforma laboral "de verdad".

En este sentido, ha pedido a los partidos vascos que cumplan la palabra que les han dado y que voten 'no' el jueves. En concreto, al PNV le ha señalado que, al margen de darle importancia a la estatalización, le dé también importancia a acabar con el despido "fácil y barato", y que, si no se le da la vuelta a esos dos elementos, vote en contra el jueves.

Por su parte, la secretaria general de LAB, Garbiñe Aranburu, ha aseverado que la reforma laboral "perpetúa la precarización de las relaciones laborales y no recupera derechos", por lo que ha instado a rechazar la misma en el Congreso, en los centros de trabajo y en la calle, y ha reclamado a PNV y EH Bildu que sean la voz de los trabajadores vascos.

"En ese marco de diálogo social, la mayoría trabajadora de este país no está representada, ya que CCOO y UGT solo representan al 34% de los trabajadores de Euskal Herria. Por eso pedimos a EH Bildu y PNV que trasladen nuestra voz al marco del Congreso", ha reclamado.

ELA, LAB, Steilas, ESK, Etxalde e Hiru consideran que la movilización es la principal herramienta para mejorar las condiciones laborales de la clase trabajadora, por lo que han hecho un llamamiento a los trabajadores vascos para que el 2 de febrero se concentren ante los centros de trabajo para mostrar su oposición a esta reforma laboral.

(habrá ampliación)