El secretario general de Agricultura y Alimentación del Ministerio de Agricultura, Fernando Miranda, ha insistido en la necesidad de ampliar la superficie cultivable dentro de la Política Agrícola Común (PAC) que entrará en vigor el próximo año dada la situación actual derivada de la invasión de Ucrania por parte de Rusia.

Miranda ha señalado que esto incrementará el potencial productivo, pero no es "suficiente" y por ello, sobre todo para países que son "estructuralmente" importadores de materias primas para alimentación animal como España también interesa que ese potencial lo tengan otros países al no poder traer productos de Ucrania y Bielorrusia.

El responsable del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en el marco de una jornada sobre el sector agrario de Castilla y León ante la nueva PAC (2023-2027) organizada por el Colegio de Ingenieros Agrónomos de Castilla y León, ha señalado que con el fin de tener más suministro a nivel internacional se han tomado medidas como la de flexibilizar las importaciones de otros países de productos como los piensos, de manera que se favorezca a los ganaderos.

Miranda ha señalado que ante el cambio de contexto con la guerra en Ucrania desde hace unas semanas ahora hay que "modular y ajustar" a las circunstancias los planteamientos iniciales de seguridad de suministros y de costes de producción, lo que de alguna manera se tiene que incorporar en la PAC.

A este respecto, ha apuntado que durante esta semana se verán propuestas por parte de la Comisión Europea auspiciadas por los estados miembros que ya se propusieron en la reunión extraordinaria de los ministros de Agricultura, que pusieron encima de la mesa esta circunstancia sobrevenida y que afecta tanto a la agroalimentación en la Unión Europea y en el mundo general y por tanto.

OTRAS MEDIDAS

Además, ha explicado que también se van a ver medidas en relación al coste de algunos 'inputs' como el gasóleo, que afecta a la agricultura, por parte del Gobierno, lo que se suma a medidas como la flexibilización para la importación de maíz importado para la alimentación animal, de manera que no haya dificultad en el suministro.

De la misma forma, ha asegurado que se sigue "muy de cerca" el resto de los asuntos que tienen que ver, por ejemplo, con el incremento de la capacidad de producción por parte de la Unión Europea de maíz y de proteaginosas con el objeto de aumentar la superficie disponible para la siembra, para lo que es necesario flexibilizar las medias que tienen por ejemplo con la superficie que se dedica a superficies de interés ecológico.

Así, se ha mostrado a la expectativa de la propuesta que presente la Comisión Europea en este sentido así como de otras que permitan "aliviar" determinadas circunstancias actuales, sobre todo en aquellos sectores que tienen más dificultad para trasladar al resto de la cadena el incremento de costes de producción.