El caso más reciente se vivió a finales de 2011, cuando el Comité Asesor Técnico del Ibex 35 decidió que su composición debía ser de 36 empresas tras dar entrada en el índice a DIA y no realizar ninguna salida en el Ibex debido a que los valores financieros habían sufrido una disminución de liquidez como consecuencia de la prohibición de las operaciones cortas. (Ver: Normas de composición del Ibex 35
)
La puesta en marcha de manera oficial del Ibex tuvo lugar el 14 de enero de 1992, por lo que cuenta con más de veinte años de vida.( Composición histórica del Ibex 35) Pero, ¿qué valores aún permanecen en el Ibex desde su nacimiento? Únicamente doce: Acerinox, BBVA, Bankinter, Santander, FCC, Gas Natural, Endesa, Iberdrola, Mapfre, Popular, Repsol y Telefónica.
Algunas compañías que formaron parte del Ibex en su inicio ya no lo hacen, pero siguen cotizando en el Mercado Continuo. Esta circunstancia se produce ya que para cotizar en el Ibex se deben cumplir los siguientes requisitos: que su capitalización media computable en el índice deberá ser superior al 0,30% de la capitalización media del índice durante el periodo de control y que haya sido contratado por lo menos en la tercera parte de las sesiones de ese periodo. Aun así, cabe la opción de que una empresa pueda ser elegida para formar parte del índice si estuviese entre los 20 valores de la bolsa española con mayor capitalización.
Con el objetivo de velar por el cumplimiento de estos requisitos y de que la composición del Ibex cuente con los valores más líquidos de la bolsa española se reúne el Comité Asesor Técnico. Este comité tiene durante el año cuatro reuniones: dos ordinarias (para redefinir los índices) y dos de seguimiento, en las que generalmente no se aplican cambios a no ser que se experimenten cambios significativos en la liquidez de algún valor. Además, si lo estiman oportuno pueden realizarse reuniones con carácter extraordinario.
Aun así, no sólo la composición del Ibex ha sufrido cambios por compañías que ahora cotizan en el Mercado Continuo, sino que otras han dejado de cotizar en bolsa o han sido compradas por otra e integradas en la empresa más grande, como fue el caso de Banesto, absorbido por el Santander.