Chrysler tiene hasta el 1 de mayo para conseguirlo y los 500 millones le permitirán seguir en funcionamiento hasta entonces.

Estos detalles están contenidos en el informe sobre el programa de rescate financiero de 700.000 millones de dólares, denominado Programa de Alivio de Activos Problemáticos (TARP por sus siglas en inglés), puesto en marcha a finales del 2008.

El periódico "The Detroit News" indicó que el informe, de 250 páginas, también revela que el Departamento del Tesoro ha gastado la casi totalidad de los 25.000 millones de dólares destinados al sector del automóvil.

Según el informe, de esa cifra, 13.400 millones de dólares han ido a parar a GM, 4.000 millones a Chrysler, casi 6.000 millones a GMAC (el brazo financiero de GM) y 1.500 millones a Chrysler Financial (el brazo financiero de Chrysler).

Además, el Departamento del Tesoro ha reservado 1.250 millones de dólares para el programa por la administración del presidente Barack Obama para mantener las garantías de vehículos en caso de que GM o Chrysler se declaren en suspensión de pagos.